Los resultados no reflejan el cambio estructural que se requiere, señala la ASF
En la segunda jornada de revisión de la cuenta pública 2012, el auditor Juan Manuel Portal presentó en la Cámara de Diputados un ejemplo del panorama con las escuelas de tiempo completo
Martes 22 de abril de 2014, p. 44
La Auditoría Superior de la Federación (ASF) explicó a la Cámara de Diputados que los programas de la Secretaría de Educación Pública (SEP) para mejorar la calidad de la enseñanza en el país no han funcionado y, desafortunadamente, los resultados no reflejan el cambio estructural requerido para abatir las diferencias en el servicio y preparar adecuadamente a los alumnos, independientemente del nivel que cursen
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En la segunda jornada de revisión de la cuenta pública 2012, el auditor Juan Manuel Portal Martínez presentó a la Comisión de Vigilancia de la Cámara de Diputados, como un ejemplo de ese panorama, el programa de escuelas de tiempo completo, que inició en el sexenio de Felipe Calderón y fue retomado por el gobierno de Enrique Peña Nieto.
Informó que la ASF constató que en este programa sólo fueron incluidos 6 mil 460 de 199 mil 442 planteles públicos de educación básica, pero la SEP no tenía información de los profesores a cargo de los turnos extendidos, del equipamiento adicional, del seguimiento y evaluación del programa y mucho menos de uno de los componentes básicos del proyecto: la alimentación de los alumnos.
Al respecto, Marisela Márquez Uribe, directora de Auditoría de Desempeño al Desarrollo Social de la ASF, explicó que ante la falta de información por parte de la SEP, el órgano fiscalizador no pudo evaluar los resultados de las 6 mil 460 escuelas. Lo único que se sabe, indicó, es que el programa se redujo a incluir la materia de inglés.
Detalló que a partir de estimaciones realizadas al programa se encontró que, de haberse aplicado en la totalidad de los planteles, se habrían requerido recursos superiores a los ejercidos.
Refirió que para atender al universo de escuelas públicas, sólo en su operación sería necesario 107 por ciento de lo que se destina a la subfunción de educación básica, y que para alimentar a 1.3 millones de alumnos de primaria, a siete pesos por ración, se habrían requerido 9 mil 436 millones de pesos, monto superior en 276 por ciento a lo ejercido en 2012 al programa.
El presidente de la Comisión de Vigilancia, José Luis Muñoz Soria (PRD), refirió en un punto de acuerdo enviado a la SEP en octubre, que entre 2009 y 2012 se invirtieron 5 mil 413 millones de pesos, un promedio de 201 mil pesos al año por plantel.
La administración de Peña Nieto solicitó 6 mil 102 millones de pesos para el programa en 2013, y 12 mil millones para 2014, un aumento de 96.63 por ciento.
Asimismo, Portal Martínez detalló que las deficiencias educativas se reflejan en los resultados de la prueba Enlace –suspendida en 2014 por la SEP–, que demostraron un nivel insuficiente en español y matemáticas en primaria y secundaria, en el ciclo escolar 2011-2012.
La conclusión, dijo, es que la disminución de las brechas educativas fueron marginales
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Agregó que los resultados de la prueba son atribuibles, en gran medida, a la falta de articulación de las competencias en las estructuras curriculares; al deterioro de la infraestructura física; a la falta de lineamientos para garantizar que las escuelas cumplan los requisitos de calidad, seguridad, funcionalidad y equidad, así como al escaso equipamiento de los centros escolares, la insuficiente profesionalización de los maestros, la deficiente gestión escolar y los recurrentes conflictos laborales
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