No promueve derecho a la salud del comprador y confunde al consumidor: Calvillo
El Poder del Consumidor y Fundación Interamericana del Corazón rechazan política desaseada
Miércoles 23 de abril de 2014, p. 36
El Poder del Consumidor y la Fundación Interamericana del Corazón se ampararon ante el juzgado de distrito en materia administrativa el pasado 15 de abril contra el etiquetado frontal de alimentos y bebidas promovido por la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
Alejandro Calvillo, de El Poder del Consumidor, advirtió que existe una política desaseada
de la institución reguladora de salud, pues consideró que el nuevo etiquetado no promueve ni favorece el derecho a la salud de los compradores, por el contrario, confunde a los consumidores.
Señaló que el nuevo etiquetado es un retroceso en la prevención de la obesidad y la diabetes, ya que el requerimiento diario de azúcar que se marca es hasta de 90 gramos (100 por ciento de la demanda diaria recomendada) equivalente a 18 cucharadas cafeteras de azúcar, mientras el criterio de la Organización Mundial de la Salud (OMS) es de 50 gramos como máximo tolerable, medida que está en estudio para reducirse a la mitad: 25 gramos de azúcar, equivalente a cinco cucharadas.
No es posible que la Cofepris quiera tomarle el pelo a los mexicanos y diga que esta regulación va más allá de la OMS. No pueden hacer etiquetados con la industria sin convocar antes a los especialistas.
Dijo que mientras la Secretaría de Hacienda creó un impuesto para bebidas azucaradas, así como para alimentos con alto contenido energético, y la Secretaría de Salud fijó criterios para la venta de alimentos en escuelas, la Cofepris impone un etiquetado que va a decir que estos mismos productos serán buenas opciones para los consumidores, lo cual es falso
.
Insistió en que el etiquetado frontal no es claro, contraviene las recomendaciones internacionales y de la estrategia nacional contra la obesidad y la diabetes.
El amparo expone tres puntos específicos de reclamo, entre ellos que no es entendible para la mayor parte de la población mexicana, de acuerdo con los únicos estudios realizados para su elaboración en el país, y que los criterios contenidos en el nuevo decreto van en contra de lo que marca la OMS y los desarrollados en Estados Unidos, así como los que retoman la estrategia nacional contra la obesidad y diabetes.
Durante la conferencia se presentó el sketch ¿Cómo hacer un etiquetado engañoso?, en el cual el supuesto doctor Leonard Albert Einstein expuso: “con esta nueva etiqueta, si una Coca-Cola de 600 mililitros, que tiene 63 gramos de azúcar, va a leerse que contiene 60 por ciento del requerimiento diario recomendado, que quiere decir entonces que el 100 por ciento del requerimiento diario recomendado será de 90 gramos, que es lo que fija la Cofepris, respaldada por la Secretaría de Salud.
“Esto habría que multiplicarlo por 365 días del año para que dé un total de casi 33 kilos de azúcar como requerimiento anual recomendado.
Por tanto, la Cofepris recomienda que comamos 32.8 kilos de azúcar por año. ¡Nada más y nada menos!
concluyó.