La Cámara de Diputados integró ayer las comisiones que investigarán los contratos otorgados por Petróleos Mexicanos (Pemex) desde 2006, así como la construcción de la línea 12 del Metro. De esta última, el dirigente perredista Jesús Zambrano ordenó dejar fuera a legisladores propuestos por la jefatura del gobierno capitalino, y de paso a los ligados con Marcelo Ebrard.

En cambio, y a pesar de la oposición interna, Zambrano se presentó en San Lázaro para terminar de amarrar a Luis Espinosa como presidente de la comisión que indagará los contratos de la paraestatal, quien es uno de sus dos administradores financieros en la bancada y yerno del director de adquisiciones de la Cámara de Diputados.

Aunque el pleno aprobó que forme parte de ese grupo el presidente de la Comisión de Vigilancia, José Luis Muñoz Soria, por la tarde el legislador fue presionado por la vicepresidenta de la mesa directiva, Aleida Alavez, para abandonar su lugar y cederlo al presidente del Comité de Administración, Guillermo Sánchez, quien a su vez es contador de René Bejarano.

Mientras, la que dará seguimiento al escándalo derivado de las fallas en la llamada línea dorada será conducida por el ex alcalde de Tultitlán Marco Calzada Arroyo (PRI).

Con la integración del equipo de diputados para revisar los contratos de Pemex con empresas privadas, se pretende dar continuidad a la investigación iniciada no sólo por la forma en que se hicieron negocios con Oceanografía, investigada por un presunto fraude a Banamex, sino todos los que ofreció la petrolera en el sexenio de Felipe Calderón y el primer año de gobierno de Enrique Peña Nieto.

La Comisión de Vigilancia, que fue excluida de la indagatoria a pesar de que propuso una subcomisión, ha informado que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) presentó durante siete años observaciones a contratos otorgados por Pemex a Oceanografía, que ascienden a 18 mil 242 millones de pesos, pero que la paraestatal ignoró y continuó otorgándole obras.

El acuerdo para integrar ambas comisiones se retrasó, debido a un conflicto en la bancada del Partido de la Revolución Democrática (PRD), para la que se tenían considerados sólo tres lugares y había cinco candidatos.

La presidenta de la Comisión de Igualdad de Género, Malú Micher, solicitó participar en la comisión, pero fue rechazada con el argumento de que es ebrardista; a Roberto López Suárez, presidente de la comisión que investiga el caso Monex, los chuchos no quisieron incluirlo, porque la decisión se tomó por el peso de las fuerzas, para las que no cuenta la opinión de la jefatura de Gobierno.

Nueva Izquierda únicamente autorizó que sean integrantes de la comisión Carlos Morales López, como secretario de la comisión; y Carlos Reyes Gámiz y José Luis Muñoz Soria.