Las Vegas, 3 de mayo.

El estadunidense Floyd Mayweather júnior ganó con experiencia y oficio a un voluntarioso argentino Marcos Maidana, a quien ni la fuerza ni el valor le alcanzaron para vencer a uno de los peleadores más completos del momento.

Mayweather unificó, por decisión mayoritaria, el título welter del Consejo Mundial de Boxeo y de la Asociación Mundial de Boxeo en una emotiva pelea en la arena del hotel-casino MGM Grand de Las Vegas.

Maidana sacó su mejor y única arma: la fuerza, mientras que Mayweather respondió a lo Mayweather: con técnica refinada y dominio del oficio.

El argentino no dejó de atacar, pero le faltaba puntería. Para el quinto episodio, Floyd ya lo había descifrado y logró conectarlo con furia en un upper, aunque resultó con un ligero corte en la ceja derecha.

Desesperado, El Chino buscó un golpe demoledor y en un intento conectó un volado que cimbró al estadunidense. Le exigió y Floyd perdió el asalto.

Mayweather ya tenía la pelea bajo control, aunque con mucha dificultad porque Maidana es un ariete que no retrocedía, pero sus limitaciones le impedían hacer verdadero daño al campeón. El retador usaba cualquier recurso: metía cabeza, codos o pegaba abajo del cinto.

En el penúltimo episodio Maidana estaba tan desesperado de no poder someter ni lastimar, que empujó al contrincante con tal fuerza que estuvieron a punto de salirse del cuadrilátero. El estadunidense también buscaba el nocaut y se fue con todo.

Al final la pelea no bajó de intensidad pero fue evidente que este oficio llamado boxeo tiene un maestro llamado Mayweather.