a apertura del sistema electoral es necesaria para lograr una democracia de mejor calidad. Un sistema abierto a la participación ciudadana contribuye a que aumenten la representación y la credibilidad, lo que da legitimidad al sistema político. Hoy sólo 37 por ciento de los mexicanos apoya la democracia, pues los procesos electorales se han convertido en una forma de reciclar la partidocracia, lo que significa que 63 por ciento de los ciudadanos se siente fuera de la distribución social del poder.

Con la reforma política, se aprobaron hace unos días dos leyes secundarias muy importantes: la de procedimientos electorales y la de partidos políticos. La primera de éstas regula las candidaturas independientes, figura que tuvo en Zacatecas su cuna experimental. Esperábamos que los legisladores aprovecharan la oportunidad para abrir los procesos electorales a los ciudadanos, pero no ocurrió así: al igual que en Zacatecas en su momento, los líderes políticos aplauden las candidaturas independientes ante los micrófonos, pero las obstaculizan en los procedimientos normativos.

En el caso de la ley que comentamos, se niega a los candidatos independientes la posibilidad de presentar listas para diputaciones de representación proporcional; se les da la posibilidad de recinir financiamiento público, pero con una fórmula que se ensayó en Zacatecas para asignación de propaganda oficial, la cual demostró que el monto para cada uno es muy pequeño en comparación con lo que se destina a los candidatos de los partidos. Y los aspirantes independientes a la Presidenicia de la República, se estipula que deberán reunir al menos uno por ciento de la lista nominal en 17 entidades federativas. Para senadores y diputados federales el mínimo es de 2 por ciento. Es decir, al igual que en Zacatecas, se establece la figura de candidato independiente en la ley, pero la participación se hace nugatoria debido a los umbrales que se imponen.

Tendrá que ser, como en Zacatecas, la presión de la sociedad civil organizada la que logre que el sistema electoral abra las puertas a los ciudadanos, porque los partidos políticos actuales no están dispuestos a abrir el sistema de representación en nuestra incipiente democracia.