Expertos en legislación y asuntos ambientales señalaron que México no posee un adecuado manejo y conservación de su biodiversidad, pues ha apostado todo a la creación de áreas naturales protegidas (ANP), muchas de las cuales no cuentan con planes de manejo ni con recursos para la protección y conservación.

En el foro Vacíos y omisiones de la legislación en materia de biodiversidad en México, realizado en el Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la UNAM, la académica e investigadora María del Carmen Carmona Lara y el biólogo y consultor Enrique Ongay Delhumeau precisaron que gran parte de la política en la materia se centra en las ANP y olvidaron lo demás, es decir, todo lo que señala el Convenio de Diversidad Biológica de la ONU aprobado en 1992.

En el Día Internacional de la Biodiversidad, conmemorado ayer, la abogada experta en derecho ambiental señaló a La Jornada que “el problema es que le hemos apostado a la conservación in situ, a las ANP y estamos desprotegidos en la conservación ex situ, que tiene que ver con el reparto equitativo de los beneficios de los recursos genéticos y con el desarrollo de biotecnología. Ahí estamos perdiendo oportunidades sobre todo para garantizar el derecho a la alimentación”.

Criticó también que la visión en las ANP sea que en esas áreas en primera instancia no se haga nada, pero son 12.9 por ciento del territorio nacional y en ellas viven 10 millones de mexicanos, que pareciera que son de segunda, no se les quiere dejar hacer nada, cuando podrían manejar proyectos de restauración, de conservacion y no solamente de protección por la protección.

Ambos especialistas también lamentaron que se hayan decretado ANP, prácticamente a destajo. El gobierno tenía la tradición de cada 5 de junio (Día mundial del Medio Ambiente) de declarar un área. Lo malo es que lo hacían sin programas de manejo.

Añadió que otra cosa más grave de las ANP es que ninguna tiene presupuesto. Indicó que sí hay recursos para pagar nóminas, pero no para los manejos y menos para asuntos tan triviales como costear papel higiénico. Una de las tragedias de las ANP es cómo administro el dinero para el papel de baño de los visitantes. Precisó que lamentablemente las cuotas que se cobran para ingresar a las ANP, van a la federación.

Ongay Delhumeau criticó que en el el afán de decretar ANP, muchas ni siquera coinciden con las zonas donde está la biodiversidad y añadió que incluso en las ANP es en donde hay mayor deforestación, un ejemplo es la reserva de Montes Azules, con 46 por ciento de deforestación.