Lo que se hizo al reducir de 3.9 a 2.7 por ciento la proyección oficial de crecimiento de este año fue sencillamente sincronizar las expectativas con la dinámica económica y un reconocimiento de la realidad del país, afirmó Ildefonso Guajardo Villarreal, titular de la Secretaría de Economía (SE).

Al término de un encuentro con cerca de 300 jóvenes de la segunda generación de la Escuela Nacional de Cuadros del Partido Revolucionario Institucional (PRI), el funcionario aseguró que hay confianza de los agentes nacionales y extranjeros en la evolución económica del país y explicó que una prueba es el creciente flujo de inversión extranjera directa a México.

Guajardo Villarreal descartó que el retraso en legislación secundaria de las reformas haya afectado la marcha de la economía e influido en el ajuste a la proyección oficial de crecimiento, así como que vaya a afectar la creación de puestos de trabajo. Sostuvo: No hay un impacto sobre la generación de empleos ni sobre el crecimiento real del proceso. Simplemente se determina que la cifra original se corrige a 2.7 por ciento.

Oportunidad histórica: Camacho

El secretario de Economía participó ayer como figura central de un encuentro con jóvenes de todo el país de la segunda generación de la Escuela Nacional de Cuadros del PRI, acto en el cual César Camacho Quiroz, presidente de ese instituto político, anunció en el preámbulo a la intervención de Guajardo: “Estamos a punto de concluir el periodo reformador para iniciar el periodo implementador, porque la historia nos da una oportunidad y no queremos llegar tarde from now on (desde ahora, en español)”.

En medio de un fuerte y silencioso dispositivo de seguridad, dentro y fuera de un auditorio Plutarco Elías Calles a medio llenar, el presidente del PRI advirtió que la política no se puede dejar a los improvisados y felicitó a los jóvenes por participar en los muy afortunados y provechosos encuentros con la gente grande de la política nacional. Sentenció: Nos debe seguir yendo bien, pero para que esto suceda no dejaremos nada a la casualidad.

Porque, agregó, si le va bien al gobierno del presidente Peña Nieto, le va bien, no sólo al PRI, le va bien a todos los mexicanos.

El titular de Economía dedicó dos terceras partes de su exposición a su trayectoria de 40 años en el PRI, desde que se inscribió, a los 17 años. El resto de su intervención habló del reto que representa la responsabilidad que nos dejó el presidente Enrique Peña Nieto; intercaladas sentencias y consejas a los jóvenes priístas, que no tuvieron que esperar 10 años como él para estrechar la mano de un secretario de Estado, a quienes sugirió que cuando en su camino por la política se les presenten varias opciones no se vayan con las que les ofrezca más salario; váyanse con el más inteligente.

Agregó: He tenido el privilegio en mi vida de nunca haber trabajado para un pende....

El funcionario agregó que la economía mexicana se sustenta actualmente en dos pilares o activos. Uno, la estabilidad financiera, una vez que ya no es tema de debate de ningún partido político la necesidad de contar con finanzas públicas sanas; el otro, la inserción inteligente en la globalidad, iniciada desde el ingreso de México al Acuerdo General de Aranceles y Comercio (GATT) ahora Organización Mundial de Comercio (OMC) hasta el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), a partir del cual se han suscrito 10 tratados con 45 países del mundo que abarcan a mil 100 millones de consumidores.

Como ejemplo de éxito citó que antes de la inserción de México a la globalidad el ingreso anual de la inversión extranjera directa era de 2 mil 500 millones de dólares, mientras en 2013 ascendió a 38 mil millones.

Apuntó que el proceso político para hacer realidad las reformas que el país necesita fue el Pacto por México y apuntó que todas tienen como denominador común lo que el presidente Peña Nieto ha llamado la democratización de la productividad.

Como el capital político es un bien limitado y perecedero, explicó, por eso el mandatario ha aprovechado el inicio de su gobierno para impulsar la aprobación de las reformas y seguir con su implementación.