Indianápolis, 25 de mayo.

Ryan Hunter-Reay se convirtió en el primer estadunidense en ganar las 500 Millas de Indianápolis desde 2006 al hacer un espectacular rebase sobre el brasileño Helio Castroneves en la última vuelta para ganar la carrera que tuvo el segundo final más reñido de la historia.

Hunter-Reay fue rebasado el año pasado cuando quedaban tres giros para el final y terminó tercero. Pero después de cambiar la punta con Castroneves tras un reinicio con seis vueltas para el final, fue el piloto de Andretti Autosport el que hizo el decisivo sobrepaso.

Castroneves terminó segundo en su intento de lograr su cuarta victoria en las 500 millas. Marco Andretti fue tercero y el colombiano Carlos Muñoz cuarto.

Kurt Busch llegó sexto en su primera carrera del día. Se esperaba que volara de inmediato a Carolina del Norte para la carrera de NASCAR el domingo por la noche.

El volante del equipo Andretti hizo el máximo esfuerzo para superar justo en la última vuelta a Helio y además pudo resistir con el pie firme en el acelerador para cruzar primero la meta, apenas a 60 milésimas de segundo por delante.

Soy un joven estadunidense orgulloso, eso es seguro, dijo Hunter-Reay en el podio. He visto esta carrera desde que estaba sentado en pañales en el suelo delante de la televisión. Esto es historia, esta carrera es la tradición del país, agregó tras ganar en el óvalo Indianápolis Motor Speedway.

Luego de intercambiar la punta en las últimas cinco vueltas, Hunter-Reay logró rebasar por fuera a Castroneves en el penúltimo giro para entrar por delante del brasileño por apenas 60 milésimas de segundo.

El estadunidense Marco Andretti entró tercero y los colombianos Muñoz y Juan Pablo Montoya quedaron cuarto y quinto, respectivamente.

Las últimas siete vueltas fueron un cerrado mano a mano entre Hunter-Reay y Castroneves hasta que, faltando siete vueltas, el estadunidense Townsend Bell chocó contra el muro de protección y provocó la segunda bandera roja de la carrera.

Mientras las cuadrillas limpiaban la pista, los autos esperaron en los pits impacientes. Cuando se dio la señal de reanudación, Hunter-Reay y Castroneves estuvieron retándose, cada uno con maniobras más atrevidas para rebasar al otro.

Obviamente la bandera roja rompió el ritmo de la carrera, pero felicito a Ryan y a su equipo Andretti, dijo Castroneves. Fue una gran carrera, la televisión, los fanáticos se divirtieron mucho y yo también disfruté mucho.

La prueba fue interrumpida sólo cuatro veces por accidentes, todos menores, y se dio un hecho histórico en la carrera. Debido a la falta de banderas amarillas, la edición de 2014 estableció un récord de velocidad media de 340.97 kilómetros por hora.