Porto Alegre, 15 de junio.

Por primera vez en la historia de los mundiales, un gol fue convalidado con el uso de la tecnología, al confirmar la segunda anotación de Francia, que derrotó 3-0 a Honduras en el estadio Beira-Rio.

Se trató de un tiro cruzado que el delantero Karim Benzema lanzó desde la izquierda y pegó en el poste, el balón rebotó hasta el otro palo, donde estaba el cancerbero hondureño Noel Valladares, quien no pudo controlarlo y lo metió en la portería, inmediatamente lo sacó del arco, pero para entonces los jugadores galos ya festejaban el tanto.

La repetición del Ojo de halcón demostró que la pelota cruzó la línea luego de la intervención de Valladares, por lo que contó como autogol del arquero.

Esta tecnología, que se utiliza por primera ocasión en un Mundial, fue probada en la Copa Confederaciones de Brasil el año pasado para detectar si una pelota cruzó la raya de gol. El sistema tiene siete cámaras apuntadas sobre cada arco, con un sistema similar al usado en algunos torneos de tenis.

Tras unos segundos de discusiones, el video mostró en las pantallas gigantes que el balón no había entrado tras el remate en el poste. Pero otra toma posterior entregó una imagen en la que la pelota había cruzado la línea de meta cuando el arquero volvió a tomarla.

Esto generó airados reclamos en el banco de Honduras, con los integrantes del cuerpo técnico hablando con los árbitros y sus pares franceses. El entrenador Didier Deschamps abrazó al técnico de Honduras, Luis Fernando Suárez, y le dijo: lo cobró la tecnología, mientras el timonel colombiano le contestaba no, no puede cobrarse; al final, Suárez se conformó con la decisión.

Otra peculiaridad del partido fue que empezó sin que se escucharan los himnos oficiales. El silbante brasileño Sandro Ricci, al ver que la música no comenzaba, ordenó a los equipos romper el protocolo y que los jugadores se dieran la mano. Un portavoz de la FIFA no supo explicar por qué los himnos no fueron interpretados.

Benzema abrió la senda del triunfo con un tiro de penal al minuto 44 y después el delantero del Real Madrid redondeó la victoria con un violento disparo de derecha, al minuto 72.

Con su contundente victoria y pese a la baja por lesión de Frank Ribéry, Francia comenzó a reparar la mala imagen que dejó en el Mundial de Sudáfrica 2010, cuando fue eliminada en primera ronda tras un escándalo de indisciplina.

Honduras aguantó casi todo el primer tiempo el ataque por ambos costados de los bleus, pero una falta sobre el área sancionada como penal –y que dejó a los centroamericanos con 10 hombres– definió el rumbo del compromiso. Benzema cobró el castigo engañando a Valladares, quien voló hacia el lado contrario.

Con su remate, el delantero del Real Madrid impartió justicia en un partido cortado por el juego brusco, con siete tarjetas amarillas y un expulsado, el volante Wilson Palacios, quien acumuló dos amonestaciones, la segunda por falta sobre el volante Pogba en el área penal, y dejó en inferioridad numérica a los centroamericanos.

Apenas iniciaba el segundo tiempo cuando Francia amplió su ventaja con el autogol.

Los campeones del orbe en 1998, que recibieron una primera llamada de atención tras una temprana tarjeta amarilla sobre Patrice Evra, fueron metiendo a los catrachos en su propio terreno. Las faltas continuas cerca del arco de Valladares dejaron a Honduras a expensas de los bleus.

Tras una falta por el sector izquierdo, Valbuena cobró al área y Matuidi pescó un rebote que terminó estrellando en el palo. Los franceses lanzaron poco después su segundo aviso. Griezmman, que finalmente fue preferido por Deschamps sobre Olivier Giroud, chocó de cabeza la segunda pelota en el travesaño tras un servicio también por la izquierda de Evra.

Francia manejó los hilos, Honduras no pudo dar la sorpresa y ahora vendrá una prueba más dura frente a Suiza, mientras los catrachos irán por la resurrección frente a Ecuador.