Costa de Marfil buscará ante Grecia ser el segundo invitado a octavos del grupo C
Martes 24 de junio de 2014, p. a20
Fortaleza, 23 de junio.
Colombia ya hizo la tarea al justificar su calidad de cabeza de serie y ahora le queda decidir si da descanso a algunos de sus titulares habituales. A los dirigidos por José Pekerman les basta el martes un empate en su último duelo de primera ronda, contra Japón en Cuiabá, para amarrar el primer lugar del grupo C de la Copa del Mundo.
Del otro lado de la llave, Costa de Marfil buscará ante Grecia el pase a los octavos de final, un hito histórico que querrán dedicar a todo el país y pasar por primera vez de la fase de grupos, en su tercera participación mundialista (tras 2006 y 2010).
Los africanos tienen tres puntos; uno Japón y Grecia, mientras que Colombia, con seis unidades, ya está clasificada en este sector C.
A los marfileños les sirve el empate contra Grecia, siempre que Japón no gane a Colombia. Incluso perdiendo podrían clasificarse, pero sólo que sea por un gol de diferencia y de que los nipones no derroten a los cafeteros.
Los elefantes tienen un aliciente extra para escribir esta nueva página en los anales de sus nación, ya que les han ofrecido a los jugadores una prima de 68 mil dólares, cantidad que duplica la ofrecida en primera instancia, de acuerdo con lo anunciado este lunes la federación respectiva de ese país.
En su primer Mundial luego de 16 años, en Brasil 2014 los colombianos resolvieron sin complicaciones su clasificación en sus dos primeras salidas, con victorias 3-0 sobre Grecia y 2-1 contra Costa de Marfil. Con eso ya se aseguraron al menos igualar su mejor actuación en una justa mundialista, los octavos de final de Italia 90.
Todo un cambio de escenario para una selección que aspira a ser protagonista tras su brillante eliminatoria, pero que llegó a Brasil en medio de la incertidumbre por la baja de varias figuras clave a causa de lesiones, particularmente su goleador Radamel Falcao.
Enfrente tendrá al Japón del técnico italiano Alberto Zaccheroni, que llegó con grandes expectativas pero ahora, tras una derrota y un empate, necesita imperiosamente una victoria en su última salida para evitar la eliminación, además de que Costa de Marfil no derrote a Grecia.
Los sudamericanos todavía tienen un considerable arsenal esperando en el banquillo. Con el pase a octavos en el bolsillo, Pekerman debe decidir si hace cambios en el equipo titular de los dos primeros partidos para dosificar el plantel. Para refrescar el medio campo, tiene a Quintero, con 21 años, uno de los más jóvenes del plantel –podría ir desde el arranque– así como Fredy Guarín, del Inter de Milán, que aún no debuta en Brasil.
El primer lugar del grupo C podría ser un regalo envenenado, pues en la próxima fase se medirá con el segundo del D, que probablemente se definirá entre charrúas e italianos.