El Nobel colombiano fue un heraldo del imaginario de la cultura popular: Miguel Barnet
Viernes 27 de junio de 2014, p. a13
La novela Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez (Aracataca, 1927-DF, 2014), fue conmemorada este miércoles en Casa Lamm con una velada donde cuatro escritores hablaron de la enorme importancia de este libro en la historia de la literatura latinoamericana.
Los escritores Miguel Barnet, presidente de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba; Gonzalo Celorio, Jaime Labastida y Felipe Garrido destacaron la novela a 47 años de su publicación original como un hito en la narrativa latinomericana, en el contexto del homenaje internacional al Nobel de Literatura 1982, quien falleció el pasado 17 de abril.
Barnett, amigo cercano de García Márquez, afirmó: Gabo es otro acontecimiento en mi vida porque aprendí muchas cosas de él. La primera: qué es un escritor auténtico, legítimo, sin ambages, sin falsas erudiciones, sino con una sabiduría extraordinaria porque él fue un heraldo del imaginario de la cultura popular
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Además, comparó al narrador con Miguel de Cervantes y añadió que su muerte fue una conmoción mundial
. Con Cien años de soledad, dijo, “Gabo culmina un periodo de búsquedas conceptuales y expresivas relacionadas con su original manera de reflejar la realidad tomando en cuenta los mitos que nutren la historia y la cultura popular de nuestro ámbito común.
“Con su escritura el realismo mágico fue más allá de ser una simple construcción ficcional para convertirse en la base misma de un sistema poético como lo fue también en la obra del mexicano Juan Rulfo (…), adquiere una dimensión poética que no ha encontrado par en el mundo contemporáneo”.
Tiempo circular
La conmemoración de la novela de García Márquez fue organizada por la Academia Mexicana de la Lengua y Casa Lamm. Claudia Gómez Haro, directora académica de este recinto, y Beatriz Pagés, secretaria de Cultura del Partido Revolucionario Institucional, se encargaron de moderar la mesa, adornada con mariposas amarillas.
Entre el público estaban Dagoberto Rodríguez, embajador de Cuba en México, la pintora Carmen Parra y los actores Lilia Aragón y Carlos Bracho; además, Miguel Sabido y Mireille Roccatti.
El poeta Jaime Labastida reflexionó sobre el tiempo en la obra del narrador: “El espacio mítico fundado por García Márquez, Macondo, es un espacio cerrado en todos los sentidos, que pertenece sólo a su imaginación desbordada (…) de igual modo, el tiempo de Cien años de soledad es un tiempo clausurado, un siglo exacto.
El espacio y el tiempo forman en Macondo una esfera ajena, cerrada al exterior. Sólo así resulta posible bajo la apariencia del realismo mágico volver verosímiles desde un punto de vista literario hechos que caen fuera de cuanto la ciencia y la experiencia nos han dicho siempre que es lo real, digo, la realidad cotidiana
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En su intervención, el narrador Felipe Garrido mencionó que “mientras más apegada a la tierra viva una comunidad, más seguro estoy que su tiempo será circular (...) Nosotros lo conservamos aunque hayamos adoptado otras formas de vida, en el fondo hay una figura circular del tiempo. En el caso de Cien años de soledad, la domina”. Luego leyó algunos fragmentos de la novela sobre los amores de Amaranta Úrsula y Aureliano para ejemplificar su aserto.
Por su parte, Gonzalo Celorio dijo que con este libro García Márquez organiza en una nueva épica propia de la novela moderna nuestra más amplia y profunda realidad, la que se remonta a nuestros mitos fundacionales y la que explica la esencia de nuestras luchas libertarias y de nuestras grandes convulsiones sociales
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