Lunes 30 de junio de 2014, p. 32
Washington. Estados Unidos podrá usar a partir del martes un iné- dito arsenal legislativo contra la evasión fiscal, que le permita forzar el secreto bancario en las grandes plazas financieras mundiales, como Suiza o Luxemburgo. Es el terremoto que hace caer la represa
, afirma Pascal Saint-Amans, responsable de la unidad de lucha contra los paraísos fiscales en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). El seísmo se resume en un acrónimo, Fatca, nombre de la ley que entrará en vigor en Estados Unidos tras largas negociaciones y numerosos escándalos de evasión fiscal que implican a bancos suizos (UBS, Credit Suisse...) y sus ricos clientes estadunidenses. Con esta regulación, decenas de miles de bancos extranjeros estarán obligados a entregar constantemente información detallada acerca de los depósitos de los clientes de estadunidenses o sujetos de ser gravados por Estados Unidos. Así, los bancos extranjeros tendrán la tarea de identificar qué clientes están sujetos a este reglamento y deberán asegurarse de que tienen la capacidad operativa para satisfacer las demandas de Washington. Si no respetan esta obligación, destinada a las cuentas superiores a 50 mil dólares, se exponen a una sanción: una retención de 30 por ciento sobre los ingresos brutos percibidos por sus actividades en Estados Unidos. Es el arma atómica
, comentó Saint-Amans. Más de 77 mil bancos del mundo se mostraron dispuestos a colaborar con Estados Unidos para proteger su relación con ese país.