Un tribunal federal confirmó la suspensión provisional de la importación de papa fresca desde Estados Unidos a petición de un grupo de tarahumaras, que considera que la Secretaría de Agricultura ha ocasionado el riesgo de propagación de plagas al permitirla.

El primer tribunal colegiado mixto confirmó la resolución del juzgado quinto de distrito de Los Mochis, Sinaloa, que admitió la demanda de amparo promovida por más de 50 campesinos nómadas que recolectan papa en varios estados de la República.

Ésta es una de las primeras demandas de amparo en la que jueces del Poder Judicial federal reconocen interés legítimo a un grupo de peticionarios de amparo para inconformarse con medidas sobre importación de alimentos.

En la resolución inicial, el juzgado razonó: Es necesario establecer acciones que impidan que acontezca una catástrofe ecológica, económica y social derivada de la importación de papa fresca cultivada en los Estados Unidos, sin métodos de contención estrictos y eficaces que brinden la certeza de que no ingresarán papas contaminadas con alguna plaga cuarentenaria de las que existen en el vecino país.

El juzgado añadió que si no se actúa con prontitud y no se detiene el ingreso del tubérculo proveniente de Estados Unidos, la propagación de plagas no podrá ser contenida, y en la hipótesis de que así suceda, las plagas pueden generar daños a los productores nacionales de papa, chile y tomate, lo que por sí mismo traería un posible desabasto nacional de esos alimentos.

La resolución de primera instancia (que concedió la suspensión a los campesinos) fue confirmada en todos sus términos por el tribunal colegiado de circuito.