El Presidente promulgó las leyes secundarias en materia de telecomunicaciones
Amplía la libertad, fortalece la igualdad e incrementa la prosperidad en el país, aseveró
Martes 15 de julio de 2014, p. 12
La nueva legislación en materia de telecomunicaciones y radiodifusión amplía la libertad, fortalece la igualdad e incrementa la prosperidad de los mexicanos
. Es una reforma que refrenda la importancia de este sector como un servicio público de interés general y reafirma la rectoría del Estado mexicano
, aseguró el presidente Enrique Peña Nieto.
En el acto de promulgación de las leyes secundarias en materia de telecomunicaciones y radiodifusión, cuyo proceso legislativo concluyó la semana pasada, el mandatario enumeró sus contenidos y beneficios: libre expresión y manifestación de las ideas en los medios electrónicos, incluida Internet; desaparición del cobro por larga distancia en llamadas nacionales; licitación de dos nuevas cadenas privadas de televisión y la creación de una más (pública) a cargo del denominado Sistema de Radiodifusión del Estado mexicano.
En Palacio Nacional, durante una breve ceremonia en la que los únicos oradores fueron él y el titular de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, el Presidente aseguró también: La reforma impide cualquier bloqueo a Internet o a las redes sociales y asegura la neutralidad de la red; es decir, los usuarios accederán con plena libertad y sin discriminación a cualquier contenido o servicio
.
A este acto no acudieron los grandes dueños de los consorcios de telecomunicaciones, como Carlos Slim de Telmex, Emilio Azcárraga de Televisa y Ricardo Salinas Pliego de Tv Azteca. En cambio, estuvieron sus descendientes, directivos y abogados.
El mandatario señaló que esta reforma es resultado del Pacto por México, si bien ningún líder partidista acudió a Palacio Nacional y los legisladores de los partidos de izquierda tampoco estuvieron ahí.
Ruiz Esparza resaltó en su intervención lo fundamental de la reforma para superar las notorias insuficiencias que enfrentamos
, y anticipó nuevas inversiones (si bien no precisó el monto de las mismas) porque las nuevas normas establecen reglas claras para la competencia y libre concurrencia, evitan la doble ventanilla
, ofrecen seguridad jurídica a los usuarios y a las audiencias y norman el uso y aprovechamiento del espectro radioeléctrico, así como la preponderancia en el mercado, entre otras. Añadió que el Ifetel tiene ahora las facultades necesarias para promover la competencia y la libre concurrencia.
A su vez, Peña Nieto reiteró las muchas ventajas “muy positivas’’ de los nuevos instrumentos: el Estado está obligado a ofrecer acceso gratuito a Internet en 250 mil sitios públicos y a instrumentar medidas para llevar esta tecnología de la información a 70 por ciento de los hogares y a 85 por ciento de las micro, pequeñas y medianas empresas, pues en el primer caso, detalló, hoy sólo 30.7 de las casas mexicanas disponen de ese servicio.
Además, a partir del 1º de enero de 2015 ya no existirá el cobro de larga distancia nacional en telefonía fija, con lo cual los consumidores ahorrarán alrededor de 19 mil 600 millones de pesos anuales, y los usuarios de celular podrán hacer y recibir llamadas en cualquier parte del territorio nacional sin importar cuál empresa les provea el servicio.
El saldo del llamado prepago, abundó el mandatario, tendrá vigencia de un año y no de días o meses como hasta ahora; la consulta del saldo será gratuita, y quienes dispongan de plan tarifario obtendrán recibos que detallen cada cobro con la opción de pagar por minuto o incluso por segundo, así como la potestad de cancelar el servicio si los operadores de la compañía cambian las condiciones del contrato.
En materia de radiodifusión, Peña Nieto consideró que las nuevas leyes fomentan la competencia, la innovación y programación más diversa, porque habrá más televisoras y nuevos canales. Asimismo, los suscriptores de televisión de paga recibirán la señal de los canales abiertos sin costo adicional y se incorpora la prohibición para contratar en exclusiva, por parte de alguna televisora, contenidos o programas de amplio interés.
Además, anunció el 31 de diciembre del próximo año como fecha límite para efectuar la transición de la televisión analógica a la digital, así como el plazo de 36 meses concedido a las empresas televisivas con cobertura en más de la mitad del territorio nacional para incluir el lenguaje de señas mexicana o la subtitulación oculta en la programación, a partir las seis de la mañana.
El presidente Peña habló además de los beneficios para usuarios con alguna discapacidad, pues las compañías de telecomunicaciones deberán ofrecer equipos especiales con funciones, programas o aplicaciones que les pemitan usar los servicios contratados.