En un hecho sin precedentes, autoridades policiacas y militares rescataron a alrededor de 500 menores que permanecían privados de la libertad en la legendaria casa hogar La Gran Familia de Zamora, Michoacán, fundada en 1947 por Rosa del Carmen Verduzco.

En conferencia de prensa conjunta, el titular de la Procuraduría General de la República (PGR), Jesús Murillo Karam, y el gobernador de Michoacán, Salvador Jara, informaron que este rescate de menores –quienes se encontraban en condiciones deplorables– ocurrió luego de unas 50 denuncias anónimas que llegaron al gobierno michoacano.

Sobre el caso, el gobernador priísta precisó que varios menores sufrieron abuso sexual, y muchos eran obligados a trabajar por la administradora y fundadora de esa casa hogar, Carmen Verduzco, a quien sus pupilos apodaban La Jefa. La mujer registraba con los apellidos Verduzco a la mayoría de los menores.

Murillo expuso que se pudo ingresar a la casa hogar con una orden de cateo expedida por un juez federal de medidas cautelares. Había 500 niños en condiciones muy lamentables, informó el titular de la PGR. Entre los liberados había seis bebés, 278 niños, 174 niñas y 138 mayores de edad, mientras los detenidos son la directora del albergue y nueve personas que la apoyaban en la casa.

También presentes en la conferencia, el titular de la Agencia de Investigación Criminal, Tomás Zerón, y Rodrigo Archundia Barrientos, subprocurador especializado en Delincuencia Organizada, indicaron que tanto adultos como menores eran obligados a pedir limosna, sufrían abusos sexuales, comían alimentos en estado de descomposición y dormían en el piso, en medio de plagas.

El gobernador Jara destacó que antes del cateo hubo intentos reiterados de varias integrantes del Club de Rotarios de ingresar al inmueble. Los funcionarios indicaron que dentro del albergue fueron localizados cinco menores que habían sido reportados como desaparecidos.

La casa hogar La Gran Familia cuenta con una página en la red social Facebook en la que destaca que “desde 1947 alberga a más de 600 niños abandonados por sus padres: delincuentes, drogadictos o niños de la calle.

Agrega: Vive de la caridad colectiva o individual, voluntaria o exigida, de personas, empresas y gobierno. Con esto logra tender docentes reconocidos por la SEP, la Universidad de Guanajuato y Conaculta, destaca la página de Facebook del albergue.