El otoño de Vermont desencadenó un cambio en la obra plástica de Emilia Sandoval (Chihuahua, 1975), sin afectar su interés por el plástico como material. En 2009, Sandoval realizó una residencia artística en la entidad estadunidese de Vermont. Lo único que llevaba como materia prima eran las bolsas de plástico con las que ya había trabajado anteriormente y manta.

Al estar en un lugar tan calmado, dedicada sólo a su producción, Sandoval empezó a observar las hojas, ya que le tocó cuando adquirían tonos ocres y naranjas. Allí surgió en gran parte la serie Botánica, nuevas especies, que ha continuado. Una muestra de la misma exhibe en la galería Ethra dentro Cartografías de la memoria, exposición que comparte con Patricia Álvarez (Aguascalientes, 1956), Selma Guisande (México, DF, 1972) y María José de la Macorra (México, DF, 1964).

Emilia Sandoval relata: “Empecé a trabajar al chorrear el acrílico sobre la manta. A partir de estas chorreadas decidía sobre qué planta quería hablar en específico. Al regresar a Oaxaca –donde reside desde 2004–, en el Jardín Botánico me permitieron hacer un registro. Durante un año tomé fotografías de los cambios de los árboles y las plantas. Al mismo tiempo hacía mis bordados y piezas sobre manta.

“Por ejemplo, veo la foto del amaranto y decido que quiero hablar de ello. El título de la pieza es la combinación del nombre científico unido a la bolsa de plástico que utilicé: Kiwicha Liverpool (2012), realizada con fragmentos de bolsa de plástico, relleno sintético, hilo y chaquira. Al crear estos híbridos, o nuevas especies, reflexiono sobre el consumismo y la manipulación del ser humano sobre las plantas”. Otros nombres combinados son: Tevetia de Hierro, Acourtia FaSoLa y Asclepsia Target.

Actualmente, Sandoval cuenta con una beca de su estado natal: Artistas con Trayectoria David Alfaro Siqueiros 2014.

El proyecto propuesto consistió en continuar con la presente reflexión y temática, pero en vez de manta utilizar un soporte de lino. Además, está enfocado a plantas del norte del país, es decir, del desierto. Otras novedades de la serie han consistido en cambiar el plástico por bolsas de cartón o de papel más fino, moda actual de las tiendas.

La curadora Ana Cristina Ortego escribe que la exposición propone “una reflexión sobre lo que implica construir memorias. Las cuatro artistas indagan sobre la idea de tejer conceptos y memorias a partir de su obra. Cada una aborda esta idea de forma diferente, explotando diversos temas, construyendo sus piezas con elementos de la vida cotidiana.

Así, Patricia parte del concepto de memoria para reconstruir lo cotidiano, María José para recrear un espacio aprehendido y su relación con la naturaleza, Emilia como vehículo para recordar la naturaleza que desaparece ante el desarrollo industrial evidenciando un mundo en mutación y Selma como motor para reflexionar en torno a la idea de relaciones interpersonales.

Cartografías de la memoria permanecerá hasta el 15 de agosto en la galería Ethra, Londres 54, colonia Juárez.