Madrid, 22 de julio.

El ex presidente del Barcelona Sandro Rosell, así como el director general del club catalán, Antoni Rossich, defendieron ante un juez la legalidad del contrato de Neymar, en la investigación por supuesto fraude fiscal en el fichaje del astro brasileño. Rosell declaró que los contratos estaban hechos perfectamente.

El ex mandatario azulgrana reiteró que el fichaje de Neymar costó 57 millones de euros –unos 76.7 millones de dólares–, 17 (22.8) de los cuales se pagaron al Santos, club de procedencia del delantero, y 40 (53.8) a la compañía N&N, propiedad del padre del jugador.

Rosell dijo que al principio no leyó la letra pequeña de los contratos que se limitó a firmar, pero que al ser imputado por el juez revisó todo y concluyó que sólo cabe felicitar a la asesoría jurídica del Barça por lo bien que están hechos.

Tras la declaración de Rosell, el juez Pablo Ruz interrogó al director general del Barcelona, Antoni Rossich, como representante legal de la entidad, quien coincidió con el ex presidente del Barça en la correcta articulación contractual, negando artificios o simulación contractual”, informó el club.