El tiempo confirma que la participación de Petróleos Mexicanos (Pemex) en el capital social de la española Repsol fue una pésima decisión de negocios para la petrolera mexicana.

En un mes, Pemex registró una pérdida equivalente a 151.3 millones de pesos por la minusvalía en el precio de un paquete de 19 millones 68 mil acciones de Repsol que aún conserva, y que eventualmente podrían ser vendidas en los mercados bursátiles internacionales en agosto.

Después de que en mayo pasado Pemex vendió 7.8 por ciento de la propiedad accionaria de la petrolera ibérica, conservó un paquete de 19 millones 68 mil títulos, equivalente a alrededor de 1.4 por ciento del capital social de Repsol.

Informes oficiales revelan que el valor de las acciones de Repsol en el mercado ha disminuido 2.34 por ciento, al bajar de 19.26 euros por acción alcanzado al 30 de junio de 2014, a 18.81 euros por acción al 24 de julio del mismo año.

De esta manera, el paquete accionario de Repsol que aún conserva Pemex pasó de un valor inicial al cierre del pasado junio de 367 millones 251 mil 220 euros a 358 millones 670 mil 584 euros, lo que significó una baja de 8 millones 580 mil 636 euros, que al tipo de cambio vigente de 17.64 pesos por euro, significa una minusvalía de 151 millones 362 mil 419 pesos.

En mayo de 2014 Petróleos Mexicanos canceló en forma anticipada los tres swaps de acciones y los consolidó en uno solo, y el 3 de junio de este año canceló en forma anticipada el paquete accionario, lo cual representó la terminación de la participación de 7.86 por ciento de Pemex en Repsol.

Al 30 de junio de 2014 la tenencia accionaria de Pemex sobre las acciones de Repsol equivale a 1.44 por ciento del derecho económico y de voto en Repsol, mientras al 31 de diciembre de 2013 la tenencia accionaria de Pemex sobre las acciones de Repsol junto con los derechos económicos y de voto adquiridos a través de las acciones swaps, equivalían a 9.19 por ciento, del derecho económico y de voto en Repsol. Adicionalmente, al 30 de junio Pemex mantiene una acción de Repsol a través de la subsidiaria extranjera PMI SES.

Pemex tiene la expectativa de desinvertir este último paquete de 19 millones 68 mil títulos en agosto, después de que sea liquidado el préstamo contratado por mil millones de dolares para financiar la ampliación efectuada de 4.5 a 9.4 por ciento en el capital social de Repsol.

El pasado 4 de junio el director general de Pemex, Emilio Lozoya Austin, explicó que la venta del paquete accionario equivalente a alrededor de 7.90 por ciento fue una decisión basada en la baja rentabilidad de las acciones obtenida por la actual administración frente a otras petroleras, a las diferencias entre Pemex y Repsol por las prácticas de gobierno corporativo, y a que no se materializaron los beneficios mutuos que Pemex esperaba de la alianza industrial firmada con Repsol hace más de dos años.

Lozoya Austin señaló que de 2004 a principios de junio pasado el rendimiento obtenido por Pemex fue apenas de 30 por ciento, que se compara desfavorablemente con los rendimientos obtenidos por los competidores o por las empresas internacionales, que han tenido un rendimiento de 94 por ciento en igual lapso. Mientras, otras empresas comparables europeas integradas en promedio obtuvieron un incremento de 102 por ciento.

En mayo pasado, cuando se realizó la venta de 104 millones de títulos, equivalentes a 7.86 por ciento de la participación en la propiedad de la española Repsol, se obtuvieron alrededor de 2 mil millones de dólares netos, informó la petrolera mexicana.