La Unión Nacional de Técnicos y Profesionistas Petroleros (Untypp) y el Comité Nacional de Estudios de Energía sostuvieron que los acuerdos de los legisladores en torno a los pasivos laborales de Petróleos Mexicanos (Pemex) y de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) atentan contra los derechos sociales y laborales de los trabajadores de ambas paraestatales, y ponen en conflicto a México con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), al pretender intervenir en la vida de los sindicatos.

En conferencia de prensa, Silvia Ramos Luna, Antonio Vital, Alejandro Corona y Heberto Barrios aseguraron que las reformas aprobadas el viernes en las comisiones de Presupuesto y de Energía de la Cámara de Diputados afectarán en lo inmediato a 88 mil jubilados y a corto plazo a más de 244 mil trabajadores. Esto seguirá dañando el tejido social de la nación, porque son más de 400 mil familias afectadas. También es una alerta para todos los sindicatos que tienen contratos colectivos, pues es el desmantelamiento de los derechos alcanzados tras largos años de lucha.

Silvia Ramos Luna, de la Untypp, expuso que los artículos transitorios tercero y cuarto de la Ley de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria atentan contra la seguridad en el trabajo, pues implican el deterioro de las 258 cláusulas del contrato colectivo laboral y ponen en riesgo el futuro de las siguientes generaciones. Además, la reforma energética trae consigo la extinción de Pemex, que ha sido el sostén de las finanzas del país.

Heberto Barrios, del Comité Nacional del Estudios de Energía, desmintió que el pasivo laboral supere un billón de pesos. En diciembre de 2013, dijo, Pemex tuvo ingresos por un billón 874 mil 229.5 millones, de los cuales el costo de las pensiones y jubilaciones fue de 33 mil 263.9 millones, es decir, 1.77 por ciento del ingreso total. Están realizando una campaña mediática de linchamiento contra los trabajadores de Pemex y de la CFE. Lo que pretenden es desmantelar los derechos laborales. Es un mensaje para todos los trabajadores calificados del país que laboran en industrias muy riesgosas, de que ya no tendrán derechos de protección.

Alejandro Corona, de la Untypp, sostuvo que “no será el pueblo mexicano el que pagará los pasivos laborales de Pemex y de la CFE, sino los empleados de dichas industrias. Desacreditar a los trabajadores de Pemex es hacerlo contra la paraestatal, y ello ayuda a fortalecer el proyecto privatizador del gobierno de Peña Nieto, manifestó.

Explicó que el pueblo se ha beneficiado de las aportaciones de Pemex: una de cada tres escuelas, una de cada tres carreteras y uno de cada tres hospitales se han construido con los ingresos de la paraestatal, y sus trabajadores tienen derechos laborales, cuyos pagos representan menos de 3 por ciento de los ingresos totales de la paraestatal. De enviar el pasivo al presupuesto gubernamental se corre el riesgo de que se castigue al trabajador jubilado y simplemente ya no se les paguen las pensiones.