Guadalajara, Jal., 28 de julio.

Tras haber sido acusados por Petróleos Mexicanos (Pemex) Refinación de sustracción de hidrocarburos procesados, delitos contra la riqueza nacional y asociación delictuosa, los 19 choferes de pipas que fueron encarcelados una semana en el reclusorio de Puente Grande y liberados el sábado 26 planean demandar a la empresa por daños y perjuicios. Asimismo, analizan solicitar la intervención de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.

Fue arbitrario e injusto. Tenían la consigna de detenernos, dijo uno de los choferes, Miguel Ángel Díaz Hernández.

Pemex anunció que llevará la demanda a un tribunal unitario, que deberá evaluar la decisión del juez que sobreseyó el caso contra los 19 choferes y dos trabajadores de confianza.

El abogado del grupo, José Luis Guízar, y el secretario general de la sección 52 del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, Luis Aurelio Pérez Velázquez, se reunieron con los empleados la tarde de este lunes y les informaron que Pemex garantizó que no habrá más detenciones y que los choferes saldrán a repartir combustible con notas de remisión originales para evitar problemas.

Los trabajadores insistieron en que sus detenciones buscan desprestigiarlos para privatizar el reparto de combustible, por el que Pemex paga en promedio mil 800 pesos por viaje.