Tendrá cuatro veces el diámetro del actual y será 10 veces más potente, informan
Importante, que los científicos del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados que participan en el actual continúen en el nuevo proyecto, considera Joe Incandela, líder del programa
Jueves 31 de julio de 2014, p. 3
A casi seis años de que se puso en funcionamiento el Gran Colisionador de Hadrones (LHC, por sus siglas en inglés), el mayor acelerador de partículas del mundo, los expertos en física de altas energías ya tienen planes para impulsar la construcción de uno nuevo que tenga cuatro veces el diámetro del actual y sea 10 veces más potente. En ese proyecto podrían participar investigadores del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav), del Instituto Politécnico Nacional, según informó la institución.
El actual, en el que participan investigadores del Cinvestav, tiene 27 kilómetros de diámetro y hay planes para que el nuevo tenga de 80 a 100.
Los científicos mexicanos trabajan en el Compact Muon Solenoid (CMS), uno de los detectores más importantes del LHC. Según Joe Incandela, líder del programa, sería importante seguir contando con la participación de los investigadores del Departamento de Física del Cinvestav.
Diez billones de pilas alcalinas AA
La energía para el actual LHC debería alcanzar los 14 teraelectrovoltios (similar a la que podrían generar 10 billones de pilas alcalinas AA), en 2015, en principio.
Sin embargo, un acelerador más potente debería llegar a los 140 teraelectrovoltios, comentó el científico estadunidense.
Precisó que la colaboración de los investigacodores del Cinvestav en ese proyecto es importante, porque continuarían desarrollando los componentes que se les pidan para los detectores, además de aportar sus conocimientos.
La idea es tener un acelerador más poderoso en unos 15 o 20 años.
Según Joe Incandela, después de la observación del bosón de Higgs, lo que viene es entender cómo funciona la materia oscura y la energía oscura, pues 95 por ciento de lo que nos rodea está formado de ese material.
Para el experto en física de partículas, la energía actual que maneja el LHC estuvo muy cerca de poner en evidencia de qué está hecha la materia oscura, pero también se pretende producir esa materia en el laboratorio de la Organización Europea para la Investigación Nuclear, para lo que requieren un acelerador más grande y potente.
Incandela detalló que con estos proyectos además de contribuir a la observación de los fenómenos físicos, se ayuda a mejorar la vida de las personas. Por ejemplo, en la física médica, en la cual se mejoró la imagenología; es decir, se tiene mayor resolución de las radiografías, lo que permite a los especialistas a llevar al mínimo el grado de radiación que una persona recibe al tomarse una placa, debido a que la sensibilidad de los aparatos se incrementó 100 veces.
Esta tecnología se originó en el CMS, el detector en que participan científicos del Cinvestav, lo que significa una gran contribución para la medicina, y por por tanto para la salud de las personas, que al ser sometidas a menor radiación enfrentarán menos riesgos.