Austin, 2 de agosto.

El gobernador de Texas, Rick Perry, usará 38 millones de dólares de los fondos de emergencia para desplegar hasta mil miembros de la Guardia Nacional en la frontera con México, ante el incremento de migrantes mexicanos y de otros países centroamericanos.

Con un costo estimado de 12 millones de dólares al mes, se espera que los recursos de emergencia cubran unos tres meses de despliegue. Más fondos requerirían la ayuda de la legislatura, en la cual algunos demócratas criticaron el uso de guardias nacionales en la frontera al señalar que se trata de un desperdicio.

El gobernador continuará trabajando con los líderes del estado para conseguir recursos adicionales de diversas fuentes, incluyendo la autoridad del gobernador para responder a emergencias, desastres y ejecución presupuestaria, declaró Rich Parsons, vocero de Perry, al diario San Antonio Express-News.

Más de 57 mil niños entraron ilegalmente al país desde octubre, la mayoría procedentes de Guatemala, Honduras y El Salvador. Muchos de ellos fueron entregados inmediatamente a agentes de la Patrulla Fronteriza.

Aunque el flujo de migrantes parece haber disminuido, Perry y otros altos funcionarios en Texas expresaron su preocupación por el incremento de la criminalidad y las presiones sobre los recursos federales en la frontera.

En tanto, en la capital estadunidense, dos activistas pro migrantes pusieron estandartes en la asta bandera de la Plaza de la Libertad para exigir el fin de las deportaciones de indocumentados, en el marco de una manifestación que pidió al presidente Barack Obama extender la protección a todos los sin papales.

Dichas pancartas contenían las leyendas DACA (Acción Diferida para los Llegados en la Infancia) para todos y No más deportaciones.

Una docena de patrullas de la Policía de Servicio de Parques de Estados Unidos y de las fuerzas de seguridad capitalina, así como siete camiones de bomberos y varias ambulancias, acudieron a la céntrica plaza, ubicada a unas cuadras de la Casa Blanca.

Los bomberos, quienes utilizaron un camión con escalera telescópica, bajaron a uno de los activistas, mientras los cientos de participantes en la movilización interrumpieron el programa de oradores y cantantes para corear arriba, arriba, el pueblo está contigo.

Ambos activistas fueron detenidos en medio de vítores para los jóvenes y abucheos contra la policía.