Toronto, 10 de agosto.

El francés Jo-Wilfried Tsonga impidió al suizo Roger Federer volver a ganar un gran título al derrotar al ex número uno por 7-5 y 7-6 (7-3) en el Masters 1000 de Toronto, mientras la polaca Agnieszka Radwanska hizo lo propio con la estadunidense Venus Williams en la final de Montreal.

Tsonga, quien este lunes regresará al top ten, necesitó 1:47 horas para tumbar a un Federer más errático que el resto de la semana y que cometió dobles faltas en varios momentos críticos.

Si uno cree en algo, esto puede suceder, dijo Tsonga, quien agregó que “estoy orgulloso de lo que he logrado esta semana. Esto va a quedar en mi corazón para siempre.

Hace dos años aquí tuve problemas en la rodilla, ahora todo cambió. Esta victoria era algo realmente especial. Tengo un gran respeto por Roger, añadió.

El francés, quien hasta hoy ocupa el décimo quinto de la clasificación, cerró una semana de ensueño tras derrotar en su camino al título a cuatro top ten, el serbio Novak Djokovic, el británico Andy Murray, el búlgaro Grigor Dimitrov y Federer. Se llevó un premio de 598 mil 900 dólares.

Fue la primera vez en 12 años que un jugador gana a cuatro tenistas del top ten en una competencia de esta magnitud. El último fue el argentino Guillermo Cañas en 2002, precisamente en el torneo de Toronto.

El galo sumó el undécimo título de su carrera y el segundo de esta categoría tras el conquistado en París 2008, cuando los Masters 1000 eran conocidos con el nombre de Masters Series.

Federer, en cambio, perdió su tercera final de Masters 1000 en lo que va de 2014. Antes cayó por el título en Indian Wells y Montecarlo.

Quien también dio la sorpresa, pero en Montreal, fue la polaca Agnieszka Radwanska, tercera cabeza de serie, al imponerse 6-4 y 6-2 a la estadunidense Venus Williams.

Radwanska, la primera campeona polaca en Montreal, ganó un torneo por primera vez en el año y se llevó un cheque de 441 mil dólares, en tanto que Venus recibió 220 mil.

La polaca de 25 años empleó su incesante juego al fondo de la cancha para dominar a una Williams aparentemente cansada que llegó a la final tras una emotiva victoria en tres sets sobre su hermana Serena.

La nueva monarca, quinta raqueta del mundo, ganó en Montreal por primera vez después de haber llegado a las semifinales en dos ocasiones. Fue su primer título en un torneo desde que se coronó en Seúl en 2013.