Se reduce ventaja de Aguilar y aspiran Luna Ramos y Pardo
Lunes 11 de agosto de 2014, p. 14
A menos de cuatro meses de que el ministro Juan N. Silva Meza deje la presidencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), la elección de su sucesor está en el aire
, afirmaron fuentes judiciales, las cuales agregaron que la ventaja que tenía Luis María Aguilar Morales sobre sus compañeros se ha reducido, debido a que se rompió el bloque de ministros con carrera judicial
que lo apoyaba.
Hasta hace unas semanas se daba por hecho un pacto entre los ministros con carrera judicial Jorge Pardo Rebolledo, Margarita Beatriz Luna Ramos y Alberto Gelacio Pérez Dayán –a excepción de Silva Meza– para apoyar a Aguilar Morales, indicaron.
La idea era que Pardo Rebolledo, quien inició su encargo en febrero de 2011, se postulara dentro de cuatro años, en razón de que su periodo termina en febrero de 2026, y se decía que Luna Ramos, hermana del presidente del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), Alejandro Luna Ramos, estaba resignada a no postularse a sabiendas de que no sería bien visto en los círculos político y jurídico que dos hermanos encabezaran los máximos órganos de justicia.
En tanto, Pérez Dayán –quien lleva poco más de año y medio como ministro– aún no tiene la experiencia ni los amarres suficientes
con sus compañeros del pleno como para aspirar en este momento a la presidencia del máximo tribunal y del Consejo de la Judicatura Federal (CJF).
Los funcionarios añadieron que los cuatro votos de estos ministros (dado que desde que Vicente Aguinaco Alemán votó en 1995 por sí mismo
al contender con Juventino V. Castro y Castro por la presidencia de la Corte, se estableció el pacto de caballeros
de no votar por uno mismo) le darían gran ventaja sobre Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, ya que sólo le faltarían dos de siete para ganar. Además, con esa cantidad superaría la primera votación y se colocaría (en caso de no obtener los seis sufragios suficientes) a un paso del triunfo en segunda vuelta.
Sin embargo, trascendió que algo pasó
entre Aguilar y Pardo, que orilló a éste a adelantar su postulación y no esperar cuatro años. A Pardo –quien destacó como magistrado penal en el estado de México– se le vincula con el grupo cercano al presidente Enrique Peña Nieto y tiene presencia en la CJF.
Luna Ramos, por su parte, cambió su discurso recientemente, al aceptar que sí le interesa ser la primera presidenta de la Corte; incluso abrió una cuenta de Twitter (el primero en hacerlo y que tiene presencia constante en la red social es José Ramón Cossío Díaz), la cual, sin embargo, hasta la semana pasada sumaba sólo 783 seguidores.
Además, añadieron los entrevistados, la ministra ha incorporado en su discurso la equidad de género
, lo cual llamó la atención de sus compañeros de pleno, quienes consideran que se trata más bien de un asunto de campaña que de convicción propia.
Así, explicaron, cualquier ministro puede alcanzar dos o tres votos suficientes para pasar a la segunda ronda, lo que además favorece a Zaldívar Lelo de Larrea (salido de las filas del ligitio privado), quien se ha pronunciado por el cambio radical en la Suprema Corte para que deje de ser un actor pasivo
y se sume a consolidación del nuevo sistema político y económico del país.
Por cierto, hace unos días, Zaldívar publicó un artículo sobre la trascendencia de la SCJN en la época actual, el cual fue considerado en el máximo tribunal como un programa de campaña
, en el que convoca a sus compañeros a no dar la vuelta a la discusión sobre la constitucionalidad de las leyes estructurales de educación, telecomunicaciones, hacendaria y energética aprobadas en lo que va del gobierno de Enrique Peña Nieto y a definir sus alcances.
Los otros ministros manejan un bajo perfil, aunque se dice que Fernando Franco González Salas (quien tuvo cargos de primer nivel con Vicente Fox y Felipe Calderón) podría ser el caballo negro por su cercanía con el Ejecutivo federal.