Analistas critican al premier por las decenas de israelíes muertos en 50 días de combates
Por primera vez en siete años ingresa un camión con ayuda humanitaria a la franja de Gaza
Jueves 28 de agosto de 2014, p. 29
Gaza, 27 de agosto.
La franja de Gaza se mantenía este miércoles tranquila gracias a un cese del fuego indefinido, mientras el muy criticado primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, proclamaba la victoria, lo mismo que el movimiento radical palestino Hamas.
En las calles del golpeado enclave palestino gobernado por Hamas, la población se dirigía a tiendas y bancos, en un intento por reanudar el ritmo de vida normal tras siete semanas de intensos bombardeos.
Miles de personas que huyeron de los enfrentamientos y se refugiaron con familiares o en escuelas regresaron a sus casas, y muchos sólo encontraron escombros.
En este contexto, por primera vez en siete años, un convoy con ayuda del Programa Mundial de Alimentos de la ONU cruzó este miércoles desde Egipto hacia la franja de Gaza. Los camiones llevan comida suficiente para 150 mil personas durante cinco días, dijo Stephane Dujarric, vocero de la ONU en rueda de prensa.
Funcionarios de salud palestinos informaron que 2 mil 139 personas, la mayoría civiles y entre ellos más de 490 niños, murieron en el enclave costero desde el 8 de julio, cuando Israel inició la ofensiva Borde Protector.
La cifra de muertos israelíes se mantiene en 64 soldados y cinco civiles, entre ellos un niño.
Los militares israelíes bombardearon unos 5 mil 230 blancos en la franja de Gaza. Los militantes palestinos dispararon unos 4 mil 600 cohetes hacia Israel.
Los bombardeos israelíes afectaron 55 mil casas de Gaza, de las cuales 17 mil 200 fueron destruidas por completo o casi, según la Organización de Naciones Unidas.
Netanyahu dijo hoy en una rueda de prensa que Israel propinó a Hamas la peor derrota de su historia y señaló que dejó sin efecto los pedidos del grupo para llegar a una tregua. No se dejen impresionar por las celebraciones de victoria en la franja de Gaza... Hamas sabe muy bien qué elevado precio debió pagar por ello
.
En Israel, las sirenas que advierten de un inminente ataque de cohetes desde la franja de Gaza permanecieron en silencio, pero comentaristas expresaron su profunda decepción con el liderazgo de Netanyahu durante el estallido más prolongado de violencia con los palestinos en una década.
Hamas, que infligió las más graves pérdidas al ejército israelí desde 2006, aseguró haber destruido la leyenda del ejército israelí que se declara invencible
y se felicitó por obtener una flexibilizacion del bloqueo, su principal reivindicación.
Después de 50 días de combates en los que una organización terrorista mató a decenas de soldados y civiles, destruyó la rutina diaria y situó al país en un estado de dificultad económica, podríamos haber esperado más que el anuncio de un cese del fuego
, escribió el analista Shimon Shiffer en Yedioth Ahronoth, el diario más vendido de Israel. Podríamos haber esperado que el primer ministro fuera a la residencia del presidente y le informara su decisión de dimitir
, añadió.
Netanyahu contestó a sus críticos: no me pongo metas que no son realistas. Aquí no estamos tratando con el populismo
.
El acuerdo prevé la apertura de pasos fronterizos entre Israel y la franja de Gaza y una flexibilización del bloqueo impuesto desde 2006 por Israel, que asfixia a un millón 8 00 mil habitantes del enclave.
Las cuestiones más delicadas, como la desmilitarización y las medidas para impedir a Hamas rearmarse, así como la reapertura de un puerto y un aeropuerto en Gaza, se discutirán en El Cairo en las negociaciones previstas dentro de un mes. El cese del fuego suscita esperanza, aunque los puntos de divergencia entre israelíes y palestinos siguen siendo numerosos.