Con el ombligo al aire, el sol de junio entre las nubes, las jovencitas y los paseos por los jardines parisinos de Luxemburgo, es como el escritor Milan Kundera abre la entintada conversación con el lector en La fiesta de la insignificancia, su más reciente novela, una sátira de la existencia.

Las librerías recibieron ayer el reciente trabajo novelístico del autor, distribuido de manera simultanea en España por Tusquets Editores. A Chile llegará a fin de mes.

Un rostro tuerto dibujado a mano alzada, el ojo ausente sostenido en lo alto entre los dedos, es la imagen central del volumen de la colección Andanzas. Realizado por Kundera, el dibujo es la cara que se multiplicará en los estantes de las novedades editoriales.

Un silencio que hizo esperar a los lectores por 14 años, después de la publicación de La ignorancia, en 2000. Su trabajo más reciente, La fiesta de la insignificancia, se publicó primero en Italia, y luego en Francia, país en el que reside desde 1975.

Ha sido recibido con gran expectación y de inmediato se ha colocado en las listas de los más vendidos, expresa editorial Planeta al anunciar la distribución del libro en México.

Vuelve Kundera, es como se anuncia en el portal de una de las grandes cadenas de libros en la capital del país, para invitar a los lectores a romper la espera y adquirir el volumen. En el mensaje publicitario cita al periódico francés Le Figaro, que consignó: ¡Qué libro! ¡Qué prosa llena de dobles sentidos, capaz de provocar que al lector se haga un nudo en la garganta al tiempo que estalla en carcajadas!

Hasta ahora el autor no ha dado entrevistas con motivo de este trabajo.

Una novela alegre y cómica sobre la seriedad, es la opinión de Le Journal du Dimanche, mientras Le Monde apuntó: Una fiesta de la inteligencia.