El nivel tan bajo de los salarios mínimos constituye un poderoso factor que impulsa a la fuerza de trabajo del país a la informalidad, aseguró Ricardo Becerra, subsecretario de la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco) y uno de los artífices de la propuesta que hizo el gobierno de la ciudad para incrementar el ingreso base a 82.86 pesos.

Al participar en un foro organizado por el PRI capitalino, el funcionario expresó que si mejoran los mínimos mucha gente que está en la economía informal podría cambiarse a la formalidad.

Citó un estudio reciente en el que se aborda el caso de los invidentes en el Sistema de Transporte Colectivo y de los taxistas. En el primer caso, explicó, por vender en las instalaciones del Metro esas personas ganan 6 mil pesos al mes en jornadas de 12 horas al día, que superan, con mucho, los 2 mil pesos que equivale el pago de un salario mínimo en el sector formal.

Detalló que cuando el Gobierno del Distrito Federal puso a disposición de ese grupo social algunos empleos en el sector formal, ningún invidente quiso incorporarse a él porque ganaría tres veces menos de lo que obtenía por realizar su propia actividad informal.

En el caso de los taxistas, habitualmente se llevan 200 pesos diarios luego de descontar cuota, gasolina y mantenimiento, tras estar 15 horas al frente del volante y sin cotizar al IMSS, Infonavit ni tener sistema de pensiones.

“Si el salario mínimo en el sector formal fuese un poco mayor, y alcanzara 105 pesos más prestaciones de la formalidad, más Infonavit, más pensiones, varios de esos señores que están en un taxi por 15 horas se verían incentivados a incorporarse a la economía formal.

En declaraciones por separado, comentó que con la presentación de la propuesta por el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, a la Asamblea Legislativa se inician los trabajos para desindexarlo como unidad de medida.

Añadió que el 18 de septiembre entregará la misma propuesta a los integrantes de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), a quienes exhortará a que emprendan su propia labor para desvincularlo de todas sus leyes locales.