Aprueba el Congreso la reforma tributaria impulsada por Bachelet
Viernes 12 de septiembre de 2014, p. 34
Santiago, 11 de septiembre.
La presidenta chilena, Michelle Bachelet, llamó hoy a civiles y militares a que entreguen a la justicia la información que tengan sobre los desaparecidos durante la la dictadura militar, al cumplirse hoy el 41 aniversario del golpe de Estado pinochetista de 1973. La jornada se vio opacada por la muerte de una mujer y un policía herido en actos vandálicos en la periferia de Santiago.
El Congreso aprobó la noche del miércoles una reforma tributaria crucial encaminada a recaudar unos 8 mil 300 millones de dólares para financiar una profunda reforma educativa y mejoras en el gasto social y de salud. Significa el primer triunfo político de Bachelet, ya que se trata de una de las propuestas emblemáticas de su gobierno.
En las inmediaciones del palacio de La Moneda, unos 500 seguidores rindieron homenaje al fallecido presidente Salvador Allende, mientras en otras zonas de la capital se reportaron actos vandálicos: incendios de autobuses y automóviles, se alzaron barricadas y estalló una bomba en un cajero automático. La jornada culminó con 21 detenidos.
La mandataria dijo que en el país no hay espacio ni para la violencia ni para el miedo. En un acto celebrado en la que fue oficina presidencial de Allende, en presencia de sus hijas y nietos, Isabel Allende, senadora socialista y presidenta de la cámara alta, indicó que se seguirá luchando para que exista reparación para las víctimas de la tiranía.
En La Moneda, a primera hora, la presidenta Bachelet encabezó una ceremonia ecuménica en memoria de Salvador Allende, donde destacó la presencia de los ex mandatarios Ricardo Lagos y Eduardo Frei; de los partidos de la coalición gobernante, representantes de los movimientos de derecha Evópoli y Amplitud, y de las iglesias católica, evangélica y judía, entre unos 400 invitados.
Afirmó que Chile tiene un compromiso con la verdad, con la justicia y con la reparación
de los daños de la pasada dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), que dejó unas 40 mil víctimas, incluidos unos 3 mil disidentes asesinados. Apuntó que la lección de ese pasado golpista es que ahora en Chile no hay espacio para la violencia
, en alusión a los recientes atentados en Santiago y Viña del Mar.
En este contexto, Bachelet solicitó al Congreso debatir con urgencia
asuntos sobre derechos humanos, entre ellos una moción parlamentaria estancada desde hace años que busca anular la ley de amnistía implementada en 1978 por el régimen de Pinochet en favor de los militares. No obstante, la norma no es aplicada por los tribunales desde 1998.
En medio del acto se informó de la detención del diputado derechista y militar en retiro de Renovación Nacional Rosauro Martínez, desaforado anteriormente por la Corte Suprema y sometido a proceso por su implicación en el asesinato en 1981 de tres activistas opositores integrantes del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR).
En tanto, se dio a conocer que Estados Unidos analizó la posibilidad de darle asilo al entonces dictador Augusto Pinochet en 1986 para que abandonara el poder, de acuerdo con revelaciones de la investigadora Loreto Daza en declaraciones a un canal de televisión local.