Miércoles 17 de septiembre de 2014, p. 38
Tixtla, Gro., 16 de septiembre.
Alrededor de mil integrantes del Consejo de Damnificados de Tixtla marcharon en esta ciudad –a unos 14 kilómetros de Chilpancingo, capital del estado– para exigir a los gobierno federal y estatal que cumplan su promesa de reconstrucción y construcción de viviendas.
La tarde del domingo, damnificados por la tormenta tropical Manuel y el huracán Ingrid, ocurridos hace un año, se plantaron fuera de la sede del ayuntamiento de Tixtla para exigir audiencia con el alcalde, Gustavo Alcaraz Alarcón.
Los inconformes impidieron la ceremonia del Grito de Independencia y este martes participaron en el desfile conmemorativo del 16 de septiembre.
En Acapulco, miembros de la Coalición de Afectados por las Contingencias Naturales del Estado de Guerrero advirtieron que los cuatro albergues de la colonia Luis Donaldo Colosio no están listos para otra contingencia como la tormenta Manuel.
Señalaron que hace un año la iglesia, la primaria Luis Donaldo Colosio, el jardín de niños Calmécac y el instituto Diana Laura Colosio no tuvieron capacidad suficiente para recibir a cientos de familias damnificadas por las inundaciones, que en algunos puntos alcanzaron dos metros de altura.
Todos estábamos mojados, éramos cientos; no había alimentos ni centro de salud. Fue espantoso
, recordó Rosalba Villavicencio, secretaria de la coalición de vecinos.
Relató que algunas personas permanecieron hasta dos semanas en los refugios, mientras bajaba el agua en este sector de fraccionamientos de la zona Diamante, que colinda con la Laguna de Tres Palos y un brazo del río La Sabana.
Los activistas señalaron que un año después de la devastación causada por Manuel, la situación en los albergues es la misma; además, Protección Civil ignora su demanda de que se construyan sistemas para mitigar daños a sus casas en caso de anegamientos.