El presidente Enrique Peña Nieto recibió ayer en visita de cortesía al príncipe y la princesa Akishino de Japón, quienes están en México en el contexto de la celebración de los 400 años de la misión Hasekura y de la participación japonesa como país invitado a la 42 edición del Festival Internacional Cervantino, que comienza el próximo miércoles.

En el patio de Palacio Nacional se realizó la ceremonia oficial de bienvenida, donde se entonaron los himnos nacionales de las dos naciones. El príncipe Akishino es el segundo hijo del emperador Akihito, y segundo en la línea de sucesión al trono imperial de Japón.

Al término de la ceremonia se trasladaron al salón de Acuerdos por la escalera monumental, donde se detuvieron para que el maestro Luciano Cedillo, conservador de Palacio Nacional, les diera una explicación de los murales de Diego Rivera.

Peña Nieto ofreció una comida en honor de los príncipes, donde señaló que a lo largo de cuatro siglos, japoneses y mexicanos han tenido una relación cercana y profunda, que se ha reflejado en las visitas recíprocas al más alto nivel durante los últimos meses.

Recordó que en la visita oficial que realizó el año pasado a la nación asiática, y durante la estancia del primer ministro Shinzo Abe en México, en julio de este año, concretamos importantes acuerdos para intensificar nuestros intercambios económicos, culturales y de cooperación.