Monterrey, NL, 8 de octubre.

La seguridad pública está presente en la preocupación de la sociedad mexicana y se advierten señales de debilidad institucional en algunas partes del país, admitió el presidente Enrique Peña Nieto.

Ubicó entonces a Nuevo León como ejemplo de la superación de crisis y adversidades cuando existen compromisos compartidos y voluntad.

Se logran tales objetivos, insistió, cuando no se evade ni se da vuelta a los problemas.

Frente a unos 6 mil regiomontanos –mujeres en su mayoría–, el mandatario ofreció actuar “con voluntad férrea, decidida y cabal’’ para elevar la calidad de vida de los mexicanos. Más allá del origen partidario de cada gobierno, de cada nivel, lo importante es armonizar los esfuerzos, comprometernos realmente y alcanzar los objetivos que la población espera de sus gobiernos.

No se refirió de manera directa a la ola de violencia en Guerrero, con el asesinato reciente de seis personas, la desaparición de 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa y el hallazgo de fosas clandestinas, en donde la policía de Iguala es señalada como la responsable de esos hechos.

Si bien fue un acto para poner en marcha instalaciones de asistencia social, la capacidad de las autoridades locales para garantizar la seguridad gravitó como tema central del mensaje presidencial.

Habló de la nueva policía de Nuevo León, denominada Fuerza Civil, creada “a partir de cero, a partir de tener la voluntad de crear un órgano confiable, una policía que brindara seguridad y confianza a la población’’. Hoy actúan más de 4 mil uniformados –resaltó– debidamente capacitados, preparados “y que trabajan por la seguridad de los neoloneses’’.

Constituye además un “referente importante que hemos querido hacer llegar a otros estados’’ y sin evadir, “cristalizar y materializar objetivos’’. Ofreció voluntad y compromiso del gobierno federal para “trabajar al lado de los esfuerzos locales’’.

El caldero político de Nuevo León está en punto de ebullición por el cambio de gobernador el año entrante y la definición de las candidaturas. En ese contexto, una de las aspirantes a la nominación, Margarita Arellanes, del Partido Acción Nacional (PAN), no pasó desapercibida. Peña Nieto refirió así durante los saludos de introducción en su mensaje: “…a distintas autoridades; a la presidenta municipal de Monterrey. Bueno, no está’’.

El Macrocentro Cultural y Deportivo San Bernabé se erigió sobre seis hectáreas en terrenos antes usados como basureros. A lo largo de 15 meses y con una inversión de 214 millones de pesos hay desde un colegio Conalep hasta espacios de salud, de prevención de adicciones, deportivos, talleres y artísticos, ludotecas, andadores, biblioteca, entre otros.

El gobernador Rodrigo Medina definió a este lugar como un modelo de intervención eficiente, donde la gente puede convivir, recibir mejores servicios, enseñar, fortalecer el tejido social y transformar a la población.

Representan, apuntó, un complemento a las labores de seguridad en términos de cohesión familiar.

Jorge Carlos Ramírez Marín, titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, encargada federal de la obra, resaltó la existencia de las reglas de operación y de la normatividad administrativa como elemento para el buen uso de los recursos públicos y de ninguna manera como pretexto para decir no a proyectos de este tipo. “Es una inversión que vale la pena’’, resumió.

Peña Nieto también entregó en esta ceremonia diversos apoyos de los programas sociales a cargo de la Secretaría de Desarrollo Social y entre ellos el del programa Prospera.