Después del estreno en el festival Cervantino, presentan la obra en la ciudad de México
Una democracia puede resistir la fuerza desesperada de un pueblo con hambre, inquiere David Olguín
Miércoles 15 de octubre de 2014, p. 6
Ambientado en la época romana, resurge Coriolano. El complejo personaje creado por William Shakespeare siente un odio y profundo desprecio por el pueblo
, al que llama el monstruo de mil cabezas o la horda de perros callejeros
.
Así lo explica el dramaturgo David Olguín, director del montaje de Coriolano, considerada la gran obra política de Shakespeare
, donde se aborda el tema del conflicto internacional en Roma, la lucha del poder y la insolencia del mismo poder”.
Además, sobresale el conflicto interno de este personaje, pues es un hombre con un orgullo desmedido y una soberbia terrible
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Coproducida por la Compañía Nacional de Teatro (CNT) y el Festival Internacional Cervantino (FIC), la obra se estrenó el 9 de octubre en el Teatro Principal de Guanajuato, en la edición 42 del encuentro artístico-cultural. Ahora, del 16 al 19 de octubre y del 13 al 16 de noviembre se escenificará en el teatro Jiménez Rueda, en la ciudad de México.
De esa forma, explica Olguín, es como Shakespeare cuestiona los proyectos democráticos y reflexiona sobre si en medio de las injusticias existentes entre las diferentes clases se puede dar una noción de vida pública, ordenada y civilizada
.
Incluso, refiere el director, por el lado mexicano contemporáneo “nos toca esta tensión entre proyectos políticos autoritarios que aparentemente manejan todo para el pueblo, pero sin éste. Es decir, el pueblo es mangoneado por caciques inmorales –que pueden ser sus representantes– o bien totalmente manipulado por intereses económicos de nuestros patricios contemporáneos”.
En la obra, cuando Coriolano camina se mueve como una máquina de guerra. Su voz es un tañido fúnebre; su refunfuñar, un redoble de tambores, dice su amigo Menenio.
Zonas sombrías de la humanidad
Shakespeare construyó esta obra minuciosamente para mostrarnos las zonas sombrías de la humanidad. Sus líneas de acción son cinco: la guerra, las luchas por el poder, las rivalidades entre los líderes, la convulsión de la familia y la batalla personal del héroe.
Mediante esas líneas, David Olguín inquiere a los espectadores si una democracia puede resistir la fuerza desesperada de un pueblo con hambre
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En esa obra Shakespeare convierte la vida privada en política, además de que exhibe la constitución interna de Coriolano, educado por una madre sobreprotectora, en una relación edípica; también es un niño en muchos sentidos, porque hace rabietas, es megalómano y cuando recibe una ofensa hace un capricho monumental y se pasa al otro bando y va contra su propio pueblo
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En el montaje participan 27 integrantes de la CNT ataviados a la usanza de la época romana y en la escenografía predominan murallas y muros geométricos. Sólo hay siete personajes con nombre propio, porque el resto de los actores encarnan a los soldados, patricios o al pueblo, lo cual hace a esta obra díficil de llevar a escena. Aunque sea una de las cinco mejores tragedias de Shakespeare, es una de las que menos se montan
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De largo aliento, prosigue Olguín, es una de las obras que escribió Shakespeare en un contexto romano y el personaje principal existió en el siglo V aC. Fue un guerrero romano con un conflicto interno que emerge cuando se están imponiendo los plebeyos a los senadores patricios y también durante la tensión existente entre la monarquía y el parlamento inglés
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Coriolano integra la trilogía de la CNT con las obras del mismo nombre escritas por Bertolt Brecht y Günter Grass.
Con motivo de la conmemoración del 450 aniversario del nacimiento de Shakespeare y como parte del programa temático del FIC, Coriolano tuvo cuatro funciones en el Teatro Principal de Guanajuato.
En el teatro de avenida de la República 154, colonia Tabacalera, se escenificará del 16 al 19 de octubre y del 13 al 16 de noviembre de jueves a sábado a las 19 horas y domingos a la 18 horas.