Miami, 16 de octubre.

El antiguo dueño de una clínica en Miami, Anthony Bosch, se declaró culpable de haber suministrado sustancias prohibidas a deportistas, entre ellos jugadores de las Grandes Ligas de beisbol como la estrella de origen dominicano Álex Rodríguez, informó el Departamento de Justicia.

Bosch, de 51 años, fundador y dueño de la ahora clausurada clínica Biogénesis, aceptó su responsabilidad ante el juez Darrin P. Gayles de conspirar para distribuir testostorena –hormona para formar músculos prohibida en los deportes–, informó el departamento en un comunicado.

Además, se hacía pasar como el Dr. T y fue uno de los testigos principales que llevó a la suspensión el año pasado de 14 peloteros, entre ellos Rodríguez, el mejor pagado y ficha principal de los Yanquis de Nueva York.

De octubre de 2008 a 2013 Bosch ofreció testosterona y otras sustancias estimulantes a atletas, pero no sólo a profesionales, sino a estudiantes universitarios y de secundaria, y muchas veces se las administraba sin consulta médica, según documentos divulgados por el departamento.

Dopar a niños es inaceptable. El mensaje es claro: hacer trampa no funciona e individuos como Bosch, que distribuyen drogas estimulantes a atletas y, peor aún, a niños, serán responsabilizados por sus acciones, dijo el fiscal Wifredo Ferrer.

El abogado defensor Guy Lewis dijo que Bosch suministró información crucial a los investigadores del beisbol y también se reunió en varias ocasiones con fiscales federales y con agentes de la DEA.

Bosch fue dejado en libertad bajo fianza hasta que reciba su condena, el 18 de diciembre, pero deberá ingresar a una clínica de desintoxicación para tratarse una adicción a la cocaína.

Podría ser condenado hasta 10 años de cárcel, pero probablemente la pena sea menor teniendo en cuenta su colaboración en el escándalo de los dopajes.

Por ese caso, Álex Rodríguez recibió la suspensión más larga en la historia de las Grandes Ligas (162 partidos), lo que le dejó sin jugar en la temporada actual.