El abogado administrativista Luis Manuel Pérez de Acha, artífice de la redacción de la acción de inconstitucionalidad planteada por 44 senadores de oposición contra la autorización que dio el Poder Legislativo al Ejecutivo federal para contratar deuda adicional por 570 mil millones de pesos y 10 mil millones de dólares durante 2014, la cual fue desechada el pasado martes por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), aseguró que la resolución implica que se le ha dejado las manos libres al gobierno federal para seguirse endeudando, no obstante que tiene restricciones constitucionales.

Entrevistado un día después de que la Corte desechó por unanimidad la acción de inconstitucionalidad que cuestionaba una decisión de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, Pérez de Acha –egresado de la Escuela Libre de Derecho– sostuvo que no sólo fue incorrecta la decisión del gobierno federal de ensanchar la deuda pública para 2014, también viola el artículo 73, fracción octava de la Carta Magna.

La restricción más importante que tiene (el titular del Ejecutivo federal) en la Constitución es que la deuda pública sólo puede destinarse para proyectos que generen ingresos directos al Estado mexicano, y la información que hemos recabado (en clara referencia al grupo de senadores que firmaron la acción de constitucionalidad) es que esa deuda pública se está destinando a gasto corriente, dijo a La Jornada el también doctor en derecho por la Universidad Nacional Autónoma de México.

Añadió que con la determinación de negarse a declarar la inconstitucionalidad del artículo 2 de la Ley de Ingresos de 2014, el pleno de la SCJN demostró que en temas de finanzas públicas seguirá dando espaldarazos al gobierno de Enrique Peña Nieto.

Ha quedado claro que cualquier tema de finanzas públicas (impuestos, gastos o deuda) que vaya a confrontar o pueda confrontar a la Suprema Corte de Justicia con el Poder Ejecutivo federal o con el secretario de Hacienda (Luis Videgaray), sin lugar a dudas será resuelto de manera desfavorable, puntualizó el experto.

Pérez de Acha refirió que la historia de México ha demostrado que la deuda pública es y ha sido un problema recurrente. Este mismo discurso lo escuchamos en las décadas de los 70 y 90, y en las recientes dos décadas, señaló.