Martes 2 de diciembre de 2014, p. a14
Madrid. La muerte de un seguidor del Deportivo de La Coruña el domingo conmocionó al futbol español y suscitó una polémica sobre la falta de previsión ante una reyerta entre aficionados ultras rivales, de los que 21 seguían detenidos el lunes. No existían elementos objetivos que permitiesen prever esos acontecimientos
, aseguró el lunes el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, tras una reunión de la Comisión Antiviolencia española. Ésta analizó lo sucedido en Madrid cuando unos 200 aficionados radicales, mayoritariamente del Deportivo y del Atlético de Madrid, se enfrentaron en las inmediaciones del estadio Vicente Calderón, horas antes de un partido de liga entre ambos equipos, que finalizó con victoria 2-0 de los locales. Unas imágenes mostraron cómo varias personas arrojaban al río Manzanares, que cruza la capital, a un hombre, probablemente Francisco Jimmy Romero Taboada, de 43 años, identificado por la prensa como miembro del grupo ultra coruñés Riazor Blues. Mientras tanto, los jugadores de Deportivo guardaron un minuto de silencio durante el entrenamiento del lunes en homenaje al fallecido.