El quórum mínimo evidencia el poco interés por asistir
Viernes 5 de diciembre de 2014, p. 18
La reciente aprobación de las reformas estructurales, el inicio inminente del periodo vacacional y la búsqueda de espacios políticos de los diputados en sus respectivos estados ha puesto en evidencia su escaso interés por acudir a San Lázaro y participar en la aprobación del rezagado paquete de leyes y reformas que se han desempolvado de las comisiones dictaminadoras.
Ayer, la sesión comenzó con una asistencia máxima de 360 legisladores y, al cierre, logró superar el quórum con 260. Aun así los diputados hicieron lo que en pocas ocasiones: aprobar de forma incesante dictámenes de ley y reformas a distintos ordenamientos. Demostraron en los hechos que no es necesario ni leer el contenido de la gaceta parlamentaria para dar por buenas las propuestas. Acríticos, levantaban el dedo (la mayoría de ellos, sobre todo priístas, panistas, verdes, algunos perredistas y de Nueva Alianza), en cuanto recibían la orden de hacerlo de sus coordinadores parlamentarios.
En ese contexto dieron por buenos el dictamen que expide la ley para impulsar el incremento sostenido de la productividad y la competitividad de la economía nacional y seis dictámenes relativos a minutas en materia de convenios constitutivos con organismos financieros internacionales.
El coordinador de Movimiento Ciudadano, Ricardo Monreal, avizoró que “el país atraviesa una crisis económica de suma gravedad; los principales indicadores evidencian que México enfrentará en el corto plazo condiciones de estancamiento y recesión que afectará el nivel de vida de todos los mexicanos.