Comunidades indígenas de 19 estados se pronunciaron por que en su proceso educativo y de evaluación su lengua originaria sea prioritaria, pero también sus saberes y valores ancestrales. Por ello, demandaron profesores que hablen su lengua y que conozcan los contenidos que imparten, así como una evaluación que tome en cuenta sus características socioculturales.

Estudiantes y padres de familia exigieron escuelas seguras, equipadas, con profesores capacitados que no se roten y mantengan un compartimiento ético. Además, demandan contenidos que incluyan su diversidad y riqueza culturales.

De acuerdo con los resultados de la Consulta previa, libre e informada a pueblos indígenas sobre la enseñanza, realizada por el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) y el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), entre las principales conclusiones destaca la exigencia en las comunidades nativas de que en los centros escolares se hable su lengua, se preserve y se fomente su uso.

Aplicada por primera vez en México y América Latina, la consulta, que se realizó en 49 localidades de 19 estados en 31 lenguas, con la colaboración de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN), tiene por objetivo conocer cómo definen los diferentes pueblos indígenas la buena enseñanza y la práctica docente, así como los contenidos y formas de evaluación que consideran deben aplicarse en sus centros escolares.

Los resultados, presentados en un acto a puerta cerrada, al que no fueron convocados los medios de comunicación, señalan que entre las medidas que deben mejorarse en las escuelas indígenas es el ambiente escolar, la enseñanza de valores y, sobre todo, el aprendizaje de las lenguas nativas.

Consideran que se debe eliminar el abuso de autoridad, toda forma de discriminación, la convivencia escolar violenta, profesores que se comportan con escasa ética, que incurren en incumplimiento laboral o prácticas de corrupción. También rechazan los contenidos educativos innecesarios y las formas represivas de evaluación del aprendizaje.

Las conclusiones, dadas a conocer por el INEE, destacan que en las comunidades originarias los alumnos no mejoran su aprendizaje porque no comprenden lo que se les enseña en español, ya que los profesores usan ese idioma como lengua de instrucción, y tampoco lo enseñan bien.

La encuesta señala, aunque sin precisar en qué estados o lengua, que existe una erosión de las habilidades comunicativas básicas de los idiomas nativos, porque la escuela no coadyuva a su conservación y desarrollo.