Sábado 13 de diciembre de 2014, p. 6
(para Ramón Rodríguez)
(Oda en la que se intenta, atrevidamente, mezclar la voz del siquisirí cordobés con la del outsider Ramón Rodríguez y la mía por supuesto
, por supuesto
.)
Cuando conocí a Ramón
–No mar, sí mar
Dragón pero no dramón
Luego me puse a pensar
En tanto Bate champión*
Que mi Córdoba regala
(Tan pequeña población).
Jorge Cuesta, Bonifaz,
Carballido, Rafael
Delgado, Capistrán,
Y aunque hay muchos más también
De la poesía del diamante
–Cual dorado vino azul–
Es el Arano, Ramón.
(...)
Es la región de los treinta
Caballeros
(Y con Ramón treinta y
uno)
De las cascadas solares
Las orquídeas y gardenias
(Perfumadas cabelleras)
(...)
Este elemento fundamental
(Por la mente y por la
menta)
De la estructura alcaloide
Que a su vez forma la
psilocibina
Conforma al hongo secreto
–Llave de oro de aquel
cuento
de Europa Maravilloso–
Y al café.
Cuando era niño Ramón
–Como todo cordobés–
Sólo tomó de esta fe.
De ahí viene sangre azul
La que corre por las venas
De la Strofharia Cubensis
(Aún con-cierta tropicalidad
Canta siempre estrofas arias).
(...)
De los dioses la morada
Del azul)…
Y de Cosco para allá.
(...)
Y si son bacas sagradas
Es por Baco, es por orfeo
Es por creer y crecer
Jugando junto al hongo
De las hadas y las brujas
Los dragones y los
duendes.
(...)
Que ha florecido en tu
cuna
De ríos que tejen al mar.
* Todas las referencias son de beisbol, deporte que aman los veracruzanos, Bate (vate), Ramón Arano: gran pitcher longevo cordobés, etcétera.