Los equipos de búsqueda también recobraron una parte del aparato
Sábado 3 de enero de 2015, p. 16
Pangkalan Bun.
Los equipos de búsqueda del avión de AirAsia que se estrelló el domingo en el mar de Java con 162 personas a bordo recuperaron este viernes 21 cuerpos, varios de ellos aún atados a sus asientos, así como lo que parece ser parte de un ala o la cola de la aeronave, informaron responsables indonesios.
La mejora de las condiciones climatológicas y un mar más calmado permitieron la recuperación de una mayor cantidad de cadávares, con lo que suman ya un total de 30, afirmó el director de las fuerzas de rescate de Indonesia, Bambang Soelistyo. También tres nuevas víctimas, además de la del jueves, fueron identificadas hoy, entre ellas la sobrecargo Khairunisa Haidar Fauz.
El avión se precipitó frente a las costas de la isla de Borneo, donde el mal tiempo y las grandes olas frenaron la búsqueda de víctimas y del fuselaje del aparato, en particular de las cajas negras, cruciales para las investigaciones.
Investigadores franceses y singapurenses se han unido a las tareas de búsqueda del Airbus malasio A320-200 que desapareció de los radares cuando intentaba evitar una tormenta poco después de despegar de la ciudad indonesia de Surabaya con destino a Singapur.
Los especialistas franceses están equipados con medios de detección que incluyen hidrófonos para localizar las balizas acústicas de las dos grabadoras de vuelo
. En total, 29 barcos y 17 aviones participan en las tareas, señaló Soelistyo, quien mencionó dos cometidos prioritarios.
El primero consiste en localizar la mayor parte del fuselaje y el segundo en ubicar las cajas negras que registran todas las incidencias de vuelo. Estas tareas quedarán a cargo del Comité de Seguridad Nacional de Transportes indonesio.
Los cuerpos y restos recuperados hasta ahora fueron encontrados en una zona relativamente pequeña, lo cual parece indicar que el fuselaje probablemente no esté lejos, indicó otro responsable de la búsqueda, S.B. Supriyadi.
Los expertos consideran que el piloto pudo haber realizado un amerizaje de emergencia antes de que el aparato se hundiera, sumergido por las enormes olas, y podría encontrarse a una profundidad de entre 25 y 32 metros.