Acuden legisladores federales a cárcel
Miércoles 7 de enero de 2015, p. 31
Puebla, Pue.
Cuatro legisladores federales se entrevistaron en el penal de San Miguel, en esta ciudad, con un grupo de presos a quienes se mantiene incomunicados y se les niega atención médica, entre ellos Rubén Sarabia Sánchez, fundador de la Unión Popular de Vendedores y Ambulantes 28 de Octubre, quien padece diabetes.
Luis Sánchez Jiménez, vicepresidente del Senado, encabezó la comitiva y señaló que el gobierno de Rafael Moreno Valle Rosas incumple la petición de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) de no segregar ni maltratar a los 50 presos políticos detenidos en el año reciente.
Anunció que seguirá exigiendo la libertad de los más de 200 presos políticos
que ha encarcelado Moreno Valle, así como juicio político contra el panista.
El senador y los diputados federales Roxana Luna Porquillo, Josefina Salinas Pérez y Carlos Reyes Gámiz, además de Francisco Jiménez Pablo, dirigente de la Coordinadora Nacional Plan de Ayala, y Dora Luz Sánchez, vocera del Frente de Organizaciones Sociales y Políticas del Estado de Puebla, explicaron que el reclusorio tiene capacidad para 150 reos, pero alberga más de 600; en cada celda, de tres por dos metros cuadrados, se hacinan 20 personas en promedio.
Acompañados por un médico internista para auscultar a los detenidos, la comitiva se presentó temprano en el penal previa solicitud a los presos y las autoridades, pero les negaron el ingreso hasta que llegó un visitador de la CNDH.
Dialogaron con Sarabia Sánchez (o Simitrio Tzompazquelli) y su hijo Rubén Sarabia Reyna, así como con Javier Montes Bautista y Raúl Pérez Velázquez, ediles de San Bernardino Chalchihuapan y San Miguel Canoa, respectivamente.
Alrededor de las 13:30 horas, luego de hora y media de entrevista, la comitiva confirmó que la salud de Simitrio Tzompazquelli sigue deteriorándose y se encuentra en riesgo, pues el fin de semana sufrió hiperglucemia (350 miligramos de glucosa por decilitro de sangre) y los médicos del penal no le aplicaron insulina hasta que sus familiares la llevaron.