Dictan la primera sentencia por tortura policiaca en Chihuahua: nueve años de cárcel
Miércoles 14 de enero de 2015, p. 32
Ciudad Juárez, Chih.
Personal de la Fiscalía Especializada en Investigar Violencia Contra la Mujer por Razones de Género identificó, con estudios de ADN, los restos de una joven originaria de El Paso, Texas, reportada como desaparecida el 30 de marzo de 2010 en el centro de esta ciudad, cuando tenía 22 años de edad. Se trata de una de las víctimas localizadas en la zona del arroyo del Navajo, en el valle de Juárez.
Este martes, Lilia Ortiz, madre de la víctima, se trasladó a Ciudad Juárez para recoger los restos de su hija, Lilia Berenice Esquinca Ortiz, luego que el lunes personal de la fiscalía se comunicó con ella. Dijo que, coincidentemente, hace tres días supliqué a Dios que si tenía a mi niña con él, que me lo dijera, y su respuesta me llegó
.
Pedirá a las autoridades texanas otro análisis
Subrayó que no confía en las autoridades mexicanas y solicitará a autoridades de El Paso, Texas, un nuevo estudio de ADN para que confirmen que los restos corresponden a los de su familiar. Explicó que sus dudas se deben a que la investigación ha sido deficiente.
Lilia Berenice salió el 3 de marzo de la casa de su abuela, en la colonia Constitución, para ir a comprar un teléfono celular a un centro comercial, pero no regresó. Ella es una de las 13 personas de origen estadunidense desaparecidas en Chihuahua en los cinco años recientes. Todos estos casos están clasificados como vigentes.
En el valle de Juárez y las cercanías del arroyo del Navajo, así como en las inmediaciones del municipio de Práxedis G. Guerrero, han sido localizados los restos de por lo menos 26 mujeres.
Para investigar los asesinatos de mujeres, principalmente las halladas en el arroyo del Navajo, la fiscalía contrató a cuatro peritos en criminología forense, entre ellos los colombianos Pedro Díaz Romero y Lucía Luna.
En tanto, Manuel Pascual Melitón y José Luis González Hernández, policías municipales de Ciudad Juárez, fueron sentenciados en juicio oral a nueve años de prisión por el delito de tortura contra un joven a quien, luego de detenerlo, lo violaron con un bate y lo golpearon para que confesara que era narcomenudista, el 6 de marzo de 2012.
Es la primera vez que se dicta una sentencia por tortura en el estado de Chihuahua.