Carlos Monsiváis era un apasionado absoluto de Andrés Audiffred, cuyo extraordinario cronista gráfico de su tiempo. Retrató el México de su época y un periodo muy peculiar, el México posrevolucionario, comentó Rafael Barajas, El Fisgón, durante la presentación del libro-catálogo ¡Así somos! Andrés Audiffred y su México: caricatura costumbrista mexicana del siglo XX.

El caricaturista de La Jornada recordó al autor de Por mi madre, bohemios en el Museo del Estanquillo/Colecciones Carlos Monsiváis, que alberga hasta el 26 de enero la exposición ¡Así somos!...

Explicó que la vocación de cronista de Monsiváis permitió reconstruir mediante su colección una gran crónica de México desde principios del siglo XIX, hasta el XXI.

Consideró que la exposición sobre Andrés Audiffred es un reventón de nacionalismo mexicano de la época, que rescata del olvido a uno de los caricaturistas más notables del país. Este catálogo equivale un poco, a rescatar una película que no conocíamos de Pedro Infante, pero en cuanto la vemos creemos que ya la habíamos visto, expresó El Fisgón.

Barajas abundó que la exposición revela entre otras cosas la gran personalidad del país. Señaló que el costumbrismo de Audiffred no se quedó en la nostalgia, sino que se renovó con los personajes arquetípicos del siglo XX, como los fifís, los peladitos, la changuita, el payo, el tarzán, los mordelones, el cantinflitas, el roto, el perro y la muchacha chicha o el maje.

Es importante rescatar esta tradición, porque es parte de lo que somos, como señala el título de la exposición, y así seguiremos siendo en muchos sentidos; por supuesto hemos cambiado y evolucionada, pero la muestra me resulta sumamente entrañable y me parece importante rescatar el trabajo de Audiffred, agregó el caricaturista.

En la presentación también intrevino el investigador Juan Manuel Aurrecoechea, quien expresó que esta visión del nacionalismo y del país, que se refleja en la exposición y el catálogo, está cargada de humor, y por tanto, de crítica; en cierta forma es una sátira a la solemnidad nacionalista del régimen.

Para El Fisgón y Aurrecoechea, el humor es la clave para comprender los rasgos esenciales de un pueblo; ese fue el universo gráfico que nos legó Audiffred. Hizo escuela. Su obra artística y humorística encontró sus raíces en el costumbrismo mexicano del siglo XIX y se ramificó en la obra de diversos caricaturistas e historietistas nacionales del siglo XX, añadió el caricaturista de La Jornada.

Aurrecoechea calificó como un acierto que el discurso museográfico colocara en un diálogo la obra de Audiffred con otros artistas costumbristas como Agustín Jiménez, Alberto Beltrán, Alfredo Zalce, Ángel Zamarripa, Carlos Mérida, Ernesto García Cabral, Fernando Bolaños, Héctor García y Miguel Covarrubias entre otros.

“Como bien señala El Fisgón en su texto, Audiffred es esencialmente un ilustrador costumbrista, que sigue la tradición plástica mexicanista del siglo XIX. Tradición que, conseguida la independencia de España, intentó documentar a la nación y definirla mediante sus costumbres y la galería de sus tipos representativos”, señaló el investigador.

Enfatizó que hace falta revisitar con una perspectiva crítica ese mundo tan poco explorado, como es el de la gráfica periodística en sus vínculos con el costumbrismo mexicano y con la imagen de la nación.

El libro-catálgo coeditado por el Museo del Estanquillo y la Dirección General de Publicaciones se encuentra a la venta en las librerías de Educal.