Dentro de cuatro años se abrirá al público la Tumba Tebana 39 (TT39), de Luxor, Egipto, al concluir la restauración en la que trabaja un equipo mexicano desde 2004, y en la que se han invertido, hasta la fecha, entre 5 y 7 millones de pesos para su rescate.

Se lleva un avance de 60 por cierto en el que es considerado uno de los monumentos funerarios más bellos de la cultura egipcia antigua, informó Gabriela Arreche, directora de la Sociedad Mexicana de Egiptología y coordinadora del proyecto que en 2014 cumplió su novena temporada.

La Tebana 39 fue construida hace 3 mil 500 años en honor a Pui-Em-Ra, sacerdote del dios Amón y personaje muy destacado durante el gobierno de la reina Hat-Shep-Sut (de la dinastía XVIII), entre otros motivos porque era su hombre de confianza que se encargaba de sus finanzas.

El complejo arquitectónico tiene 18 por 18 metros, con tres cámaras, un pasillo y vestíbulo. Jamás estuvo oculto, sino a flor de tierra, por lo que además de haber sido reutilizado como santuario funerario, fue casa-habitación y sufrió saqueo.

Es por ello que ya no se encontraron sarcófagos ni ofrendas valiosas cuando el equipo mexicano fue autorizado por el gobierno de Egipto para rescatar la TT39. No obstante haberse encontrado con una estructura a punto del derrumbe y con algunos de sus bellos muros decorados con pictogramas con huellas de cortes de sierra eléctrica, se ha logrado recuperar poco a poco el esplendor del recinto.

Reconstrucción geométrica

Los trabajos ahí realizados, explica Arreche, demuestran la calidad y el profesionalismo de los mexicanos, quienes han entregado al gobierno egipcio 10 valiosas piezas arqueológicas, que se resguardan en su Museo de Antigüedades dando el crédito correspondiente al equipo mexicano, entre ellas dos muñecos de madera y martillos.

Luego de la consolidación de todo el monumento, además del cierre de grietas y la liberación de toneladas de tierra, se ha comenzado a trabajar en la reconstrucción geométrica de uno de los muros de la cámara norte, además de la limpieza de hermosos relieves que conservan sus colores.

La misión de rescate y restauración de la Tumba Tebana 39 está integrada por especialistas en conservación, arqueología, arquitectura, restauración, epigrafía, documentación y fotografía, algunos de ellos alumnos y maestros de la Universidad del Valle de México, institución que desde hace nueve años apoya ese proyecto.

Serán ellos los que se encarguen de realizar en México la reproducción de la puerta de una de las cámaras, pues la original se encuentra en el Museo de Antigüedades de El Cairo, considerada una de las cien obras maestras del arte egipcio.

Misión mexicana en Egipto

El proyecto de rescate de la TT39 fue autorizado en 2004 por el Servicio de Antigüedades de Egipto, entonces dirigido por el destacado investigador y arqueólogo Zahi Hawass. Se trata de la primera misión arqueológica totalmente mexicana en aquel país.

La Tebana fue abierta por primera vez en 1882 y luego cerrada. En 1923 fue reabierta por Norman de Garis Davies, quien tomó fotos e hizo dibujos. Aún lucía como una de las más bellas de toda la Necrópolis del Valle de los Reyes. Después vino el saqueo y fue vandalizada.