A partir del primero de septiembre de este año Morena tendrá un grupo parlamentario en el Senado, aseguró el senador Mario Delgado, uno de los cuatro legisladores que recientemente dejaron el PRD y que tienen la intención de permanecer mientras tanto en la fracción perredista.

Expuso que el reglamento del Senado establece que sólo se podrán conformar nuevas bancadas al inicio de cada legislatura, por lo que será en septiembre cuando puedan hacerlo quienes dejaron las filas del perredismo para integrarse a Morena, como es su caso y el del tabasqueño Adán Augusto Hernández y del morelense Rabindranath Salazar.

Delgado expresó su confianza en que habrá incluso más de cinco senadores para conformar la fracción parlamentaria de Morena, aunque no quiso adelantar nombres.

En entrevista, criticó la postura de la senadora Angélica de la Peña, quien planteó que Alejandro Encinas salga del grupo parlamentario y se retire de las presidencias de comisiones a los legisladores que abandonaron el PRD.

Respecto de la demanda de la senadora De la Peña sobre que se le retire de la presidencia de la Comisión del Distrito Federal –tenida como muy importante para el partido del sol azteca como para dejarla en manos de alguien que no es su militante–, Delgado respondió que tal decisión sería inoportuna por el avance de la reforma política capitalina.

Cambiar en este momento su integración pudiera alterar la posibilidad de que se apruebe la reforma, ahora sí, a principios de febrero, como todo parece indicar que sucederá, dijo, y agregó que de todas formas es un punto que debe ser discutido y evaluado en el grupo parlamentario que encabeza Miguel Barbosa.

Delgado aclaró que su intención es permanecer por el momento en la bancada perredista, e incluso así lo convino con el coordinador Barbosa, y rechazó que la nueva coyuntura y las presiones de la corriente de los chuchos lleven a la expulsión de los cuatro legisladores que dejaron el partido.

–¿No hay riesgo de que los echen?

–No. La verdad es que hay un gran compañerismo dentro del grupo parlamentario. Veo algunas opiniones muy exageradas de parte de muy pocos legisladores. El compañerismo y el respeto han sido parte de la solidez de la bancada, la unidad como grupo, y es algo de lo que se va a valorar internamente.

El problema en el PRD, recalcó, es que toda las decisiones se dan a través del peso de las corrientes, no del valor de las personas y sus trayectorias.

–Las presiones de Nueva Izquierda para sacar al senador Alejandro Encinas de la bancada, ¿no exacerbarán más los ánimos?

–Espero que no.

Hay expectación entre los legisladores perredistas, dado que Barbosa estuvo fuera del país en días pasados –se le esperaba en la madrugada de hoy, procedente de Europa–, lo que fue utilizado por la dirección perredista que encabezan los chuchos para tratar de incidir en la expulsión de Encinas.

La suerte de éste, de Delgado y los demás ex perredistas se definirá en la reunión plenaria del grupo parlamentario, que se va a realizar los próximos jueves y viernes en esta ciudad.