Un ser excepcional, el director de orquesta y compositor Luis Herrera de la Fuente, fallecido el pasado 5 de diciembre, recibió ayer un homenaje del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) y de la Orquesta Sinfónica Nacional (OSN), que dirigió de 1954 a 1972.

Al inicio del concierto, efectuado en la sala principal de Bellas Artes, María Cristina García Cepeda, titular del INBA, expresó que la trayectoria del homenajeado acompañó la vida cultural de México contemporáneo y en forma especial al INBA.

Aparte de dirigir la OSN, Herrera de la Fuente impulsó la formación de las orquestas de cámara de Bellas Artes y de Radio UNAM. De allí que forma parte de la historia de las orquestas más importantes de nuestro país y de otras más allá de nuestras fronteras, acotó García Cepeda.

También intérprete, creador de instituciones y formador de profesionales de la música, su talento, visión y presencia constante en diversos escenarios del país fue fundamental en la construcción de la cultura sinfónica en el México contemporáneo, continuó la funcionaria, quien estuvo acompañada por los hijos de Herrera de la Fuente, Luis Javier y Magdalena, así como Sergio Ramírez Cárdenas, subdirector del INBA, y Jaime Ruiz Lobera, coordinador nacional de Música y Ópera.

Destacó su predilección por la música de Brahms y Beethoven, al mismo tiempo que su inquietud por el descubrimiento y estreno de nuevos repertorios: Gracias a Herrera de la Fuente tuvimos la oportunidad de escuchar grandes interpretaciones tanto de obras clásicas como de vanguardia, lo que trajo consigo prestigio para las orquesta mexicanas a escala internacional. La OSN realizó por primera vez una gira a Europa bajo su dirección, en la que cosechó el reconocimiento del público y la crítica.

De allí que le agradecemos los años que nos brindó su talento, su sabiduría, su generosidad, su visión de la música y el arte que tanto ha enriquecido nuestro país, refrendó García Cepeda antes de comenzar el concierto dedicado a un hombre gentil, alegre y de extraordinario sentido del humor, gran conocedor de la música y entusiasta por difundir este arte entre nuevos públicos.

El programa estuvo integrado en su mayoría por composiciones de Herrera de la Fuente. Antes de tocar Sonatina en dos movimientos, que el homenajeado le dedicó, el chelista Carlos Prieto se refirió a su larga relación con el maestro y su esposa Victoria. Recordó que el primer concierto que tocó con él fue con la Orquesta de Xalapa hace nada menos que 40 años.

Prieto estrenó la Sonatina... en 2004 en la sala Manuel M. Ponce del mismo recinto. Luego, Herrera de la Fuente la revisó y estrené la nueva versión en el mismo lugar en 2009, en un homenaje que el INBA organizó en su honor.

La volvió a interpretar en 2010, en el teatro Juárez, de Guanajuato, en la inauguración del Festival Internacional Cervantino y en ocasión de la entrega de la Medalla Cervantina a don Luis. Prieto también interpretó Sarabanda, de Bach.

La OSN, dirigida por José Guadalupe Flores, tocó dos obras del homenajeado: Concierto para piano y orquesta, para la que se contó con la solista Guadalupe Parrondo, y Fronteras, suite de ballet. Tanto Parrondo como Flores, al recibir el aplauso del público, mostraron la respectiva partitura de Herrera de la Fuente. También se proyectó un video acerca de la vida y obra del músico.