Difícilmente la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) podría entregar las autorizaciones correspondientes para el proyecto Dragon Mart, sostuvo Guillermo Haro, titular de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).

Parece irremontable superar los obstáculos ambientales y legales que hay sobre el predio, ya que se trata de un ecosistema costero y un terreno forestal donde se deforestaron 150 hectáreas, precisó.

Ante los planteamientos de los promotores del proyecto Dragon Mart de que pese a la clausura podrán continuar con el proyecto, el funcionario, entrevistado tras la presentación de la remediación del río Sonora, dijo que la Profepa clausuró terrenos utilizados indebidamente por no contar con permisos en materia federal.

La empresa está en su derecho de apelar a las determinaciones administrativas que ha tomado la Profepa; estaremos atentos a cuidar la vigencia del estado de derecho y cuidar el medio ambiente, añadió.

Confió en la contundencia de las inspecciones llevadas a cabo, así como en las opiniones técnicas y científicas de instituciones que apoyaron en la revisión del predio, y que avalan las conclusiones que determinaron la imposición de las sanciones y de la clausura.

Puntualizó que se trata de terrenos forestales, es un ecosistema costero, hay especies de flora y fauna protegidas en la norma 059 –que enlista la biodiversidad bajo protección especial– y no había permisos federales. Agregó que la empresa está obligada a observar las medidas de reforestación, restaurar y preservar lo que queda de flora y fauna.

En el sitio, dijo, no había edificaciones y los trabajos que hizo la empresa fueron de desmonte de 150 hectáreas.