El equipo mexicano batalló, pero se impuso por un gol al brasileño Atlético Mineiro
Jueves 26 de febrero de 2015, p. a14
Belo Horizonte.
Atlas sufrió y estuvo en peligro en varios momentos, pero casi al final del partido consiguió su primera victoria en la Copa Libertadores al vencer por la mínima diferencia al brasileño Atlético Mineiro, en el estadio Raimundo Sampaio.
Después del mal inicio del cuadro tapatío ante el colombiano Independiente de Santa Fe, en su segundo encuentro dentro de la competencia sudamericana, pudo llevarse el resultado y ahora enfrentará al chileno Colo Colo el próximo miércoles 4 de marzo.
El gol llegó al minuto 86, cuando Christian Suárez recibió un pase filtrado que sorprendió a la zaga, y el rojinegro encaró al portero y tras fintarlo definió de manera pulcra: Después de varios intentos fallidos llegó la recompensa.
En los primeros 10 minutos Atlas salió con toda la voluntad de conseguir su primera victoria en el torneo sudamericano, pero le hizo falta contundencia para resolver el partido.
El arquero Federico Vilar padeció en distintos momentos el asedio de los locales, y tuvo que sacar lo mejor de sus cualidades en la cabaña.
El primer aviso de los zorros fue de Rodrigo Millar, con un disparo poderoso que se fue cruzado muy cerca del poste izquierdo. Atlas parecía que se crecería al paso de los minutos, con ese arranque vertiginoso. Al 8 otra vez los tapatíos tuvieron la posibilidad de abrir el marcador, con un disparo de Luis Caballero que pasó rozando el poste. Y casi enseguida el cuadro visitante la tuvo de nuevo.
El conjunto brasileño buscó reordenar sus líneas y durante un lapso se encapsularon, se debatieron en la media cancha sin mucha claridad. Pero después, el Mineiro empezó a crecer y Atlas cedió a estos embate.
Los locales impusieron sus reglas, y Atlas se replegó para resguardar el arco.
Pasada la media hora de juego, estuvo a punto de caer el tanto del Mineiro con una jugada a balón parado, que alcanzó a rechazar el arquero Federico Vilar, y que en el rebote no pudo capitalizar André, quien resultó un verdadero dolor de cabeza para la zaga rojinegra. En la segunda parte el equipo brasileño salió con toda la voluntad de hacerse respetar en su cancha, y continuó el calvario del conjunto mexicano.