Los 47 integrantes de la comisión especial que revisará la lista de candidatos a diputados plurinominales del PRI deberá ser una portería para evitar que se cuele algún aspirante vinculado a grupos criminales o aquellos que por alguna otra causa puedan avergonzar al partido.

Cada sector y organización llevará a la mesa los nombres de quienes considere sus mejores cartas para colocarlos en los primeros sitios de cada lista, aunque los arreglos pasan –o inician, dijeron fuentes priístas– por los despachos gubernamentales debido a la postulación de funcionarios actuales como la subprocuradora Jurídica y de Asuntos Internacionales, Mariana Benítez, cercana al procurador general Jesús Murillo.

Gobernación tiene a su cargo además la generación de alertas en cuanto a antecedentes de candidatos, no sólo del PRI sino de todos los grupos políticos.

Los integrantes de la comisión temporal tricolor depurarán hoy y mañana las cinco listas de candidatos plurinominales, con pase directo a la Cámara de Dipu­tados. Es decir, el número de asientos que toca a cada partido, acorde con el número de votos obtenidos en la contienda electoral del 5 de junio próximo.

La integración final se dará a conocer el sábado entrante durante una reunión a realizarse en el auditorio central del PRI, aunque los partidos tienen hasta el 29 de marzo para registrar candidaturas.

Por el sector obrero buscaban un espacio, por la vía plurinominal, los dirigentes de los sindicatos del Seguro Social y del Metro, Manuel Vallejo Barragán y Fernando Espino, respectivamente, pero las posiciones están aún sujetas a negociación.

Integrantes del PRI dijeron que sigue firme la intención de colocar en lugares especiales al propio líder del tricolor, César Camacho; la secretaria general de este partido, Ivonne Ortega, así como Joaquín Hendrix, secretario técnico del Consejo Político Nacional, y Adrián Gallardo, presidente de la Fundación Colosio.

La comisión temporal revisora está encabezada por los citados Camacho, Ortega y Hendricks; los coordinadores parlamentarios del PRI en ambas cámaras, Manlio Fabio Beltrones y Emilio Gamboa; dos gobernadores (Durango y Querétaro); dos integrantes del sector obrero, Carlos Aceves del Olmo y Fernando Salgado; priístas de viejo cuño como Jorge de la Vega Domínguez, Adolfo Lugo Verduzco y Humberto Roque; líderes priistas estatales; la presidenta muncipal de León, Bárbara Botello, así como legisladores y dirigentes de sectores.

El líder priísta admitió ayer que el país atraviesa por una crisis de confianza del poder y los partidos políticos con los ciudadanos.

Camacho advirtió que la jornada electoral será compleja y retadora. En el caso de su partido, prometió que postularán a “gente de prestigio, de la que nadie se tenga que avergonzar.

En este punto destacó el acuerdo en la Cámara de Diputados hacia un sistema nacional de integridad pública porque, dijo, la corrupción no es sólo una falta a la ley sino un agravio a la ética pública, lo mismo en la función gubernamental que en los partidos políticos.

Que cada quien sepa lo que trae y en esto la autoridad no se puede detener o hacer excepciones por razones partidarias. La ley es pareja para todos. El sometimiento de todos a la ley, empezando por las autoridades y la gente de la política, es indispensable si se quiere recuperar la confianza, dijo.

Es por ello, comentó durante la creación de la coordinación de vinculación del PRI con el sector empresarial, que su partido pide un voto de confianza.