n mi artículo del 16 de noviembre pasado me referí por primera vez al Banco de Inversión e Infraestructura de Asia (AIIB, por sus iniciales en inglés), formado inicialmente por 21 países asiáticos el 24 de octubre en Shanghai, China.
El 22 de febrero, en este mismo espacio, me referí en especial a un estudio elaborado en Francfort, Alemania, y de una previsión ya publicada aquí de la forma en que para 2020 se darían los primeros lugares en la producción económica del mundo: primero Estados Unidos, segundo China y tercero Japón.
Para 2030, la previsión era ya primero China, segundo Estados Unidos y tercero India. Y para 2050, que era el estudio hecho directamente en Francfort, otra vez el primer sitio sería para China, pero ahora el segundo lugar sería para India y el tercero para Estados Unidos. Estos datos son congruentes con los ritmos de crecimiento actuales de esas y otras naciones.
El 29 de marzo, también en este espacio, me referí a los entonces nuevos avances del banco asiático y a la economía que la rodea. Se menciona la bienvenida que da en Pekín al nuevo banco la presidenta del Fondo Monetario Internacional. Al mismo tiempo, se van inscribiendo nuevas solicitudes de países para entrar al AIIB.
Se había hablado de un plan de 50 mil millones de dólares de capital inicial, y se pasó a 100 mil millones.
Se dio el ingreso de un grupo de países interesante por su tradicional cercanía con Estados Unidos –cuyo gobierno informalmente mostraba su descontento con el proyecto AIIB–, integrado por Inglaterra, Francia, Alemania e Italia (estos últimos tres se incorporaron el martes 17 de marzo).
El AIIB es el primer banco asiático independiente del sistema internacional Bretton Woods, a diferencia del ya existente Asian Development Bank (ADB). Finalmente, los países importantes que no entraron al AIBB fueron Estados Unidos y Japón.
Ahora, el 15 de abril fue integrado ya con formalidad el banco con 57 países: Australia, Austria, Azerbaiyán, Bangladesh, Brasil, Brunei, Cambodia, China, Dinamarca, Egipto, Finlandia, Francia, Georgia, Alemania, Islandia, India, Indonesia, Irán, Israel, Italia, Jordania, Kazajistán, Kuwait, Kirguistán, Laos, Luxemburgo, Malasia, Maldivas, Malta, Mongolia, Myanmar, Nepal, Holanda, Nueva Zelanda, Noruega, Omán, Pakistán, Filipinas, Polonia, Portugal, Catar, República de Corea, Rusia, Arabia Saudita, Singapur, Sudáfrica, España, Sri Lanka, Suecia, Suiza, Tadzhikistán, Tailandia, Turquía, Emiratos Árabes Unidos, Reino Unido, Uzbekistán y Vietnam.
El AIIB, se anuncia, va a suministrar financiamiento para carreteras, ferrocarriles, aeropuertos y otros proyectos de infraestructura en el continente. Se espera que inicie su funcionamiento a fines de este año.
No sólo hay dinero (ya con el de China sería algo). Están en Asia los países con mejor ritmo de crecimiento del mundo.
Vamos a mostrar los ritmos de crecimiento de varios países asiáticos, primero para 2014:
China 7.4%
India 7.2%
Filipinas 6.9%
Malasia 6%
Indonesia 5%
De los siguientes no tenemos el dato de 2014 y escribimos el de 2013:
Mongolia 11.7%
Vietnam 5.4%
Turquía 4%
Los datos de Mongolia se deben a un desarrollo muy acelerado de la minería.
En contraste, algunos otros con datos de 2014 (primer mundo
):
Estados Unidos 2.4%
Zona europea 0.9%
Japón -0.1%
Y estos primermundistas
quieren imponerles su política económica a los demás.
Como vemos, en Asia está concentrada una duradera riqueza. Esto permite evaluar la riqueza de la que emana el nuevo banco.
En datos como éstos se basaron los mencionados estudios de Francfort para 2050.