Hoy lunes comenzará una nueva temporada de la obra de teatro Almacenados en el teatro Arlequín.

Héctor Bonilla, protagonista del montaje, expresó en entrevista: Nos parece prudente reponer esta obra, porque, aparte de la universalidad del texto, tiene una actualidad impresionante. Es la crítica que se nos hace como sociedad, por plegarnos a lo que consideramos  cumplir con nuestro deber haciéndonos tontos.

Abundó: “Es el caso de mi personaje, que nunca ha llegado tarde, ni faltado a su trabajo; desayuna a una hora, lava los overoles dos veces por semana, aunque no los use nadie. En el fondo se está haciendo pendejo, porque trabaja para un lavadero de dinero. Esto gravita en la obra, y cuando leemos actualmente lo que la gente de la política dice en la propaganda aplastante, el narco no tendría la fuerza que tiene si no tuviera nexos con la alta política. Allí está eso y la esperanza de que un joven llegue y cambie su realidad”.

Del español David Desolá

La obra, escrita por el español David Desolá, tiene la dirección de Fernando Bonilla y también actúa Sergio Bonilla, hijos del intérprete.

Narra la historia de Lino, un obrero que se jubilará tras 29 años de trabajo en la empresa Salvaleón, SA, que fabrica mástiles y astas, pero antes de irse debe instruir al joven Nin en el puesto de encargado de almacén. El tema es la sumisión al trabajo por el miedo a no conseguir otro.

Respecto de trabajar con sus dos hijos, Héctor Bonilla comentó: Me siento orgulloso de saber que Fernando tiene la solvencia para hacer lo que hace. Nuestras convicciones políticas son similares. Esto se da en medio de una sociedad a la que le urge ser participativa, que está hambrienta de verdades.

Pocos casos

Sobre la obra de David Desola, dijo: “Me asombra mucho, porque ese tipo de textos se dan muy de vez en cuando. Siempre pongo un ejemplo para estos casos: don Félix Lope de Vega y Carpio, uno de los autores más prolíficos del Siglo de Oro español, era muy guapo y muy bueno para la espada, y tenía muchas viejas; había otro: un amargado manco que escribía pésimas novelas ejemplares, pero resulta que escribió una obra de dos personajes fundamentales, e hizo la pieza de ficción más importante de la literatura universal.

Esos dos personajes icónicos nos representan, están incluidos en nosotros, que somos un poco Quijote y un poco Sancho, que equivalen al yin y al yang, al Sol y la Luna, a esta característica dicotómica que tenemos los seres humanos.

Agregó: “Resulta que en esta obra de Desolá el póster es de dos caras que empatan, porque ese joven tiene el gran riesgo de convertirse en ese viejo; es decir, es la otra parte de la cara, y el reto es no llegar a dejar de tener el impulso de la juventud y no plegarse al sistema. Es una metáfora impresionante...

“El viejo ha desperdiciado su vida de manera absurda. Le dice: ‘tienes razón. ¡Vámonos!’ Y el joven responde: ‘no, yo me quedo porque no hay trabajo’. Estamos hablando del mundo en su conjunto, de esta acumulación de mucho dinero en pocas manos. Ahora resulta que los genios no tienen trabajo. Es el miedo al cambio. El joven de la obra se va a encerrar en el almacén con todas en contra, y el reto es qué va a inventar en esta aventura con todo en contra. Es un retrato del mundo”.

Almacenados se presentará este lunes a las 20 horas, pero las funciones de la temporada serán viernes, 20:30 horas; sábados, 18:30; domingos, 18. La cita es en el teatro Arlequín, sito en Villalongín 22, Cuauhtémoc. Frente al Monumento a la Madre.